La crisis en números. De 500 a mil 750 pesos gastan las familias duranguenses en la alimentación por semana; los núcleos están formados por tres personas.
Para completar el mandado, las amas de casa han "ajustado" la lista; atrás quedaron los zapatos, la ropa y hasta la carne, porque algunos alimentos de la canasta básica pasaron a convertirse en un lujo.
PLANIFICAN FAMILIA
"Queríamos tener otro bebé, pero con las cosas así ya se debe considerar si uno puede brindarle lo necesario a los hijos", compartió Augusto Ake. Él y su esposa Noelia Díaz tienen un bebé, y se han visto afectados por el aumento de los precios en la canasta básica.
Su sueldo inicial era de 2 mil 500 pesos quincenales; ahora gana 3 mil 300, pero la despensa se encareció más de la mitad. El 30 por ciento de sus ingresos mensuales lo invierte en alimento.
LUJOS
Margarita Luna gana 700 pesos a la semana, pero a la semana comprar la despensa le cuesta mil 750 pesos, "sola no podría, ahí está el dinero de mi esposo e hijo también".
Recordó que hace seis o siete años "llenaba" el carrito de la tienda comercial con 500 pesos; ahora lo hace con mil 200.
Por esa razón, si acaso una vez al mes realiza compras de esa manera. Antes le quedaba dinero para ahorrar y comprar ropa o zapatos.
También los dueños de las tienditas han sufrido por las alzas en los precios porque cuando abastecen su mercancía es más cara y adquieren menor cantidad.
A Ana María Sánchez le cuesta la despensa semanal 500 pesos y requiere de otros 150 ó 200 pesos diarios para comprar tortillas, leche y aceite. El monto total cierra en mil 500 por semana, el 20 por ciento de la ganancia de su pequeño negocio.
GENERAL
Los entrevistados coincidieron en que por día gastan de 150 a 200 pesos. El matrimonio los invierte en aceite, azúcar, café, cebolla, tomate, frijoles y tortillas; si desean carne o pan, ya no alcanza.
Como medida, la señora Sánchez y su familia sólo consumen carne o pescado una vez a la semana; aprovechan que la fruta y verdura es más barata en el mercado de abastos y prepara varios platillos en la semana. También eliminó el pan y el refresco.
Margarita Luna también busca precios económicos en los mercados porque en las cadenas comerciales son muy caros, con aumentos cada cuatro días. Con 50 pesos sólo compra leche y pan; este último es uno de los productos que ha subido más.