Tráfico que desquicia; tome precauciones
Obras inconclusas, irresponsabilidad de algunos automovilistas, prepotencia y las prisas de última hora ocasionan verdaderos atolladeros en los principales cruceros viales y calles de la Zona Centro.
Hoy se reanudan formalmente las actvidades en las escuelas y oficinas gubernamentales, pero con ello regresan también los congestionamientos viales que, además de ocasionar pérdida de tiempo y estrés en quienes quedan varados, producen accidentes y conflictos que pueden ser más que verbales.
TRASLADO DE ESTUDIANTES CAUSA CONFLICTOS A partir de hoy regresan a clases 383 mil alumnos de educación básica que asisten a cerca de cinco mil escuelas en toda la entidad; las calles de la capital duranguense suelen reflejar esta movilización de los escolares con congestionamientos viales.
Mario Zaldívar Mijares, director municipal de Seguridad Pública, reconoció que existen zonas escolares que representan más trabajo para los agentes de la Subdirección de Vialidad, debido a que los padres de familia que llevan a sus hijos se estacionan en doble y hasta en tercera filas, a pesar de que en reiteradas ocasiones se ha dialogado con ellos en reuniones para enfatizarles que esto está prohibido, además de explicarles las consecuencias de esta acción.
Señaló que esto es más recurrente en colegios particulares, por lo que fueron enviados elementos de Vialidad para que apoyen a detener la circulación de las calles cercanas a los colegios para que los demás coches cedan el paso a los estudiantes y así los padres de familia no se queden estacionados tanto tiempo y partan con la seguridad de que los niños entrarán seguros a las escuelas.
Detalló que aún persisten conflictos en la avenida Real del Mezquital y los bulevares Dolores del Río y Guadiana, generados por la afluencia de vehículos particulares que llegan a dejar estudiantes a los colegios particulares que ahí se encuentran.
OTRO PROBLEMA: CAMIONES Y TAXIS Los mismos choferes de camiones de transporte urbano y de taxis reconocen que sus principales ingresos son generados por la movilización de estudiantes, pues la mayoría emplea este medio para trasladarse de sus casas a las escuelas y viceversa.
Este factor también incide en la generación de atolladeros. Tan sólo en la capital duranguense existen 50 rutas de camiones de transporte urbano, que recorren los cuatro puntos cardinales de la ciudad llegando hasta las colonias más lejanas; pero todas pasan por la Zona Centro o por su periferia generando más tráfico vehicular.
Por si esto fuera poco, existen cerca de cuatro mil taxis que operan en la ciudad de Durango que, aunque están distribuidos a lo largo de la mancha urbana, también representan una carga extra en el flujo de automóviles por las principales calles y avenidas.
FLUJOS SE VUELVEN LENTOS En este sentido, el departamento de Vialidad detecta conflictos por saturación de vehículos en el crucero que conforman la avenida Lázaro Cárdenas, calle Mitla y bulevar Dolores del Río, debido a que son vialidades importantes por las que circulan, además de vehículos particulares, por lo menos tres rutas de camiones y taxis. A esto se le suma que en ese punto se ubican una escuela secundaria y un Centro para el Desarrollo Infantil (Cendi), a donde empiezan a llegar los alumnos desde las 7:30 horas y sigue hasta dos horas después.
Una situación similar se presenta en la calle prolongación Hidalgo e inicia el bulevar Armando del Castillo, donde se encuentran la Escuela Miguel Alemán, la Clínica 44 del IMSS, el Centro de Plaqueo y un jardín de niños. Cerca está también la Delegación de Seguridad Pública Municipal conocida como El Mercadito y la de Protección Civil.
Además de que por ese flujo vial circulan por lo menos cinco rutas de camiones.
La avenida Normal padece una situación similar. La entrada o salida de estudiantes de la Benemérita y Centenaria Escuela Normal del Estado (ByCENED), la Anexa, los pacientes del IMSS e ISSSTE, la escuela de Odontología, Colegio de Bachilleres Lomas, y las facultades de Medicina, Derecho y Economía, Contaduría y Administración, además de las tres rutas de camiones que pasan en ambos sentidos de circulación, hacen de ésta una vialidad conflictiva en horas "pico" para el resto de los automovilistas.
Incluso, la Zona Centro se puede convertir en un dolor de cabeza para los automovilistas desprevenidos; el más claro ejemplo es la calle Pino Suárez en el tramo de Bruno Martínez a Laureano Roncal. Son aproximadamente 13 cuadras que en horas de mayor circulación puede tomar hasta media hora en recorrerse.
La causa de la lentitud en la cirulación se debe a la actividad comercial que se realiza, que es una de las principales vías de desahogo hacia el oriente de la ciudad y de paso a la zona sur, pero sobre todo a que hay tramos en donde se empalman hasta tres rutas de camiones a pesar de ser una de las calles más angostas de la Zona Centro.
Uno de los puntos más conflictivos de la calle Pino Suárez es en la esquina de Norman Fuentes donde, a pesar de que es el único tramo en el que se vuelve de tres carriles, queda sólo un carril pues ahí se ubica una escuela primaria en donde por las mañanas y después del mediodía, es común ver que padres de familia se estacionan hasta en triple fila para dejar a sus hijos.
Otra "pesadilla" puede encontrarse por calle 5 de Febrero, que se vuelve más complicada para circular a partir de Miguel de Cervantes con embotellamientos hasta calle Constitución; y eso si no hay manifestación frente al Palacio de Gobierno pues en ocasiones esto ocasiona cierres a la circulación hasta calle Zaragoza.
TIENEN QUE EDUCAR... PERO A LOS PADRES Este comportamiento de algunos padres de familia ha obligado a la Dirección Municipal de Seguridad Pública a tomar acciones de educación vial, para hacerles ver las consecuencias de incumplir con el reglamento y el ejemplo que dan a sus hijos.
NO QUEDA MÁS QUE RESIGNARSE
Confusión, nervios, coraje y hasta "mentadas" son comunes para los automovilistas que pasan por el bulevar Felipe Pescador, debido a que el carril norte que corre de oriente a poniente está cerrado por obras de ampliación y remodelación desde principios de diciembre, mismas que obligan a tomar vías alternas como la vialidad Jesús García, que a la altura de la Central Camionera se vuelve un "cuello de botella".
No es para menos: se estima que por Felipe Pescador circulan más de 47 mil vehículos al día entre particulares, taxis, carga pesada, autobuses de pasajeros y cuatro rutas de transporte urbano.
Ahora todos se agolparán a la vialidad Jesús García, que tiene su primer punto de conflicto a un costado de la Central Camionera donde se instalaron semáforos; luego en el bulevar Instituto Tecnológico de Durango, que es alternativa para los automovilistas que se dirigen hacia el sur y en prolongación Lázaro Cárdenas norte, que es hasta donde está cerrado Felipe Pescador.
A BUSCARLE POR OTRO LADO
Con la reanudación de actividades en escuelas y oficinas, la alternativa para quienes van por Felipe Pescador a la Central Camionera es el bulevar Tecnológico para seguir por el carril sur de Jesús García hasta el bulevar Francisco Villa.
Al circular por Felipe Pescador hacia la Zona Centro se puede tomar la desviación en calle Maguey e incorporarse a la calle Negrete, 20 de Noviembre o 5 de Febrero.
Si se conduce de sur a norte rumbo a Jardines de Durango, San Ignacio o Cima, se puede tomar el bulevar Tecnológico hasta Perimetral Ferrocarril.
Pero en la glorieta Guadalupe Victoria también hay obras en curso que aún no terminan y que ocasionan el caos vial, esto debido a que el único paso para tomar la avenida Cuauhtémoc se encuentra a la altura de la secundaria Benito Juárez, en donde fue "partido" el camellón y hasta dos filas de autos tienen que "torear" a los coches que circulan por Felipe Pescador en el carril de poniente a oriente.
La Secretaría de Finanzas del Estado contempla un padrón de 324 mil automóviles en toda la entidad; se estima que la mayoría se registra en la capital duranguense y la Comarca Lagunera; pero no se contemplan los miles de vehículos "chocolatos" y cuyos dueños no son contribuyentes que circulan por las calles de la ciudad de Durango.
Entre las 50 rutas de camiones, los casi cuatro mil taxis, las obras en curso, la inconsciencia de algunos automovilistas y la falta de sincronización de semáforos en vialidades importantes, ocasionan que más de un automovilista reniegue por los recurrentes conflictos viales que se generan.
