México no merece quedar parado a mitad del cambio y mucho menos reencontrarse con el pasado y lo antiguo, que representa lo autoritario, irresponsable y que va aparejado a la pobreza y la corrupción, afirmó el presidente Felipe Calderón.
Ante más de 10 mil personas congregadas en el Auditorio Nacional para conmemorar los cuatro años de su Gobierno y una década del panismo en Los Pinos, el mandatario dijo además que es hora de renovar el ánimo por el cambio y de evitar, a la vez, ese régimen opresivo que nunca debe asomar.
Un cambio pacífico que venza inercias y resistencias, manifestó.
"Sí es posible erradicar la pobreza extrema y lograr la cobertura universal en salud. Estamos a punto de lograr que la economía se coloque a mitad del siglo entre las mayores del mundo, porque México no se merece quedar varado a la mitad del camino del cambio democrático que hemos emprendido y mucho menos la tragedia de regresar a lo antiguo, lo autoritario y lo irresponsable", advirtió.
"Y no se lo merece porque eso significa pobreza, corrupción y negación o simulación de la libertad".
El jefe del Ejecutivo se ganó el aplauso más fuerte cuando prometió mantener la lucha contra el crimen organizado.
[NACIONAL 9A]