Mala compactación. En la calle Turín, esquina con Pavorreal en el fraccionamiento Casa Blanca, se encuentra este hundimiento en trabajos que recientemente hizo el Simas.
El Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento no sólo enfrenta un severo problema financiero derivado de su cartera vencida y porque continúa la tendencia de los usuarios a no pagar el agua.
El Simas también sufre los embates de la delincuencia, ya que cientos de tapas de alcantarillas de drenaje han sido robadas.
Y el que enfrenta las consecuencias es el ciudadano de a pie y el automovilista. En el primero de los casos estas trampas viales le pueden provocar un accidente.
Los agujeros del drenaje abiertos día y noche sin señalamientos pueden repercutir en una caída de persona o de un animal, incluso su muerte por el traumatismo.
Y en lo que respecta a los automovilistas, ciclistas y motociclistas la situación es igual de grave. Daños a las juntas homociéticas del vehículo, la quebradura del sistema de dirección hidráulica por el golpe de la llanta al caer en el agujero de la alcantarilla puede causar también un accidente.
Por toda la ciudad, abundan las alcantarillas sin tapas, los hundimientos en las obras de reparación de fugas de agua y de drenaje apenas pavimentados. Esa es la imagen que presenta la ciudad, lo mismo en el Centro que en las colonias populares y residenciales.
Hasta ahora el Simas no ha iniciado un programa de reposición de tapas de alcantarillas como lo anunció a principios de año que incluía quitarles el material de acero.