También hay que recordar que aquella noche del 23 de abril de 1986, en que la Selección Mexicana de futbol tuvo un partido amistoso en el viejo Estadio Corona ante la Universidad de Chile y que ganó 1-0 con tanto del "Vasco" Aguirre, se premió a dos laguneros distinguidos.
Ellos fueron Félix Cruz Barbosa, hasta entonces el único lagunero en participar en un mundial de futbol y héroe de mil batallas, hoy dedicado a la parte técnica. El otro homenajeado fue Rodolfo Rodríguez Sancho, campeón mundial de squash, llegando a representar a México en todo el mundo.
Por cierto, su señor padre, el doctor Luis Mario Rodríguez Gorjón, nos decía el otro día que Rodolfo fue en sus años de estudiante de secundaria y preparatoria un destacado futbolista e invitado por varios técnicos a pasar al profesionalismo, pero él prefirió seguir sobresaliendo en el squash.
Actualmente Rodolfo vive en Canadá representando importante empresa internacional, y no hace mucho tuvo problemas de salud, de los que está saliendo exitosamente. Aquella inolvidable noche el obispo Luis Morales bendijo la cancha del Corona, mientras que Manlio Gómez cortaba el listón de la misma.
Ayer estuvimos en el Territorio Santos Modelo viendo el accionar del equipo albiverde, donde Rubén Omar Romano mostró en el interescuadras cómo podría enfrentar a los Potros del Atlante, con Oswaldo, Estrada, Uriel, Kanú, Lacerda y Carlos María Morales, "Lorito", Rodríguez, Darwin, Peralta y Vuoso.
A un lado de la cancha trotó Ludueña, pero al final del entrenamiento Romano admitió que de ser necesario "Hachita" podría ser utilizado de cambio en la segunda parte. Otro que se vio bien en el accionar de ayer fue Fernando Arce, quien recupera su forma y su estilo.
COLUMNAS
Mruelas@elsiglodetorreon.com.mx