Faltando cinco fechas para concluir la parte regular del Torneo Bicentenario, la presión está ya subiendo de tono en todos los grupos. En el sector Tres, donde milita Santos, la resurrección de los Pumas amenaza con ponerle grandes piedras al conjunto albiverde, así como al Cruz Azul.
El equipo de la Comarca, para su bien, tiene tres juegos en casa y sólo dos en la Capital de la República, ambos muy difíciles, primero ante Pumas y para cerrar la fase regular contra el América. En casa parecen más fáciles, ante Jaguares, Monterrey y San Luis.
Apenas regresando de CU, Santos estará preparándose para la última jornada doble, al recibir el miércoles 14 a los Rayados del Monterrey, campeones de nuestro futbol, y en el mismo Territorio Santos Modelo el domingo 18 al San Luis.
A Rubén Omar Romano no le preocupa mucho la gran cantidad de lesionados que ahora tiene el equipo, pues es de los que aceptan todos los avatares que trae una competencia, donde nunca se puede tener seguro a nadie.
Sabemos que de parte de la directiva hay el deseo de hacer un estudio a fondo en esto de las lesiones para profundizar con el programa de trabajo desde la pretemporada y la forma en que deben realizarse los trabajos de acondicionamiento físico.
Hay, por lo pronto, interés en asistir este domingo al partido contra Jaguares, porque todo mundo sabe que Pablo Marini, nuevo estratega de los chiapanecos, está dando buenas cuentas, moviendo adecuadamente su gente, como lo mostró en el empate con Monterrey.
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