Con Daniel Ludueña, utilizado en la segunda parte, Santos Laguna fue otro y puso varias veces en peligro la calificación del América, pero ya se había perdido tiempo ensayando y dándole oportunidad a quienes no habían tenido actividad, y así las Águilas aprovecharon para anotar su único gol.
Y fue una genialidad del "Rolfi" Montenegro, dándole un pase a Ángel Reyna, el que logró el tanto, aprovechando la mala marca de Uriel Álvarez, que había tenido un buen desempeño. Santos perdió balones y con Vuoso no tuvo profundidad al ataque porque Darwin jugaba atrasado.
Pero en la segunda parte Santos mostró mejor cara, sacando a Vuoso y metiendo a Oribe, y Daniel Ludueña entró por Toledo, lo que le dio el ritmo y la serenidad al equipo albiverde, así como la confianza para ir al frente una y otra vez, mientras que Oswaldo seguía evitando goles.
Santos pudo lograr el empate ya casi al final, cuando Darwin mandó potente disparo que resolvió con gran atajada Armando Navarrete y luego Oribe no pudo confirmar. Esta jugada fue importantísima para que las Águilas estuvieran de panzazo en la liguilla.
Ahora viene otro torneo, y esperamos que los planteamientos sean los adecuados, sobre todo teniendo como rival a unos Pumas que ya no asustan a nadie y que ayer se vieron mal perdiendo en Ciudad Juárez, en la despedida de Indios.
Cuando nos enteramos que Pumas había perdido, creíamos que habría modificaciones en la alineación tan anunciada por Santos, pero el técnico siguió firme y esto seguramente influyó para que los Guerreros no ganaran y no tuvieran mejor posición en la liguilla. En fin, eso es lo que ocurrió y ahora al otro torneo.
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