El mejor partido de la jornada nueve se vivió ayer en el Azteca, donde el América venció 3-2 a un Santos que empezó adelante, con el décimo gol de Christian Benítez, pero luego aflojó en la marca y permitió que Matías Vuoso le hiciera dos con otro de Vicente Sánchez.
Gran tarde la de Vicente Matías y culminada también de forma brillante por el arquero Ochoa, quien detuvo el último intento del mismo Benítez por empatar cuando ya se jugaban los cinco minutos de tiempo de compensación.
Santos no pudo aprovechar la superioridad numérica, cuando a los 67 fue expulsado Rosinei, y tampoco pudo aportar nada a la ofensiva cuando Romano mandó a la cancha a Quintero y Peralta, que no acaban de meterse en este torneo, siendo también inútiles los aportes del "Pony" Ruiz.
Santos, en la segunda parte, insistía una y otra vez yendo al frente, pero Aquivaldo Mosquera estaba convertido en el mejor auxiliar de Ochoa, mientras que Rojas aportaba pases precisos y ponía peligro con sus llegadas.
A Santos Laguna le falta reorganizar su sistema de juego, pues el actual está demasiado telegrafiado para el rival, al que resulta fácil y cómodo anular las acciones ofensivas laguneras, conociendo las limitantes que ahora acusan Peralta y Quintero, lo que deja solo a Benítez.
Además, el segundo gol de Vuoso fue un monumento a la falta de coordinación de la zaga santista, que dejó totalmente solitario a su capitán Oswaldo Sánchez, para que el "Toro", que por cierto no festejó nunca, hiciera de las suyas. Lástima de la buena tarde de Arce, anotando y defendiendo.
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