La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) brinda algunos consejos para no gastar de más. Se trata de mínimos cambios en el proceder cotidiano que se reflejan en considerables beneficios para la economía de la casa y bolsillo.
Hay que verificar la cantidad de transacciones, movimientos y consultas que ofrece el banco, ajustarse a ellas y no darles oportunidad de cobrar comisiones.
Llenar la lavadora a su máxima capacidad y aprovechar la carga de agua y el gasto de energía. Además colocar una cubeta bajo la regadera mientras sale el agua caliente, usar esa cubeta después para regar o para descargar el escusado.
De los servicios que la compañía de telefonía móvil ofrece, deshacerse de los que no se utilicen. No dejar de solicitar una aclaración puntual del estado de cuenta.
Utilizar multicontactos para con un solo botón eliminar a los vampiros de energía, esos foquitos de los aparatos que nunca se apagan.
Cambiar los focos convencionales por lámparas ahorradoras. Se puede ahorrar hasta un 75 por ciento menos en iluminación.
Meter bolsas de hielo o recipientes con agua al congelador: si éste tiene menos espacio que enfriar, trabajará menos y ahorrará energía.
Compartir el coche para ir al trabajo. Establecer rutas con compañeros. Es mejor pagar el combustible entre 3 ó 4.
En el auto procurar conservar una velocidad constante. La mayoría de los vehículos ofrece un óptimo rendimiento de combustible entre los 60 y los 80 km/h. Pisar el acelerador hasta el fondo puede consumir hasta 4 veces más combustible.
No circular con poca gasolina, ya que el vehículo funciona con menos eficiencia. El mejor momento para rellenar el tanque es cuando está a la mitad o un poco menos.
Elaborar una lista de víveres y dividirla entre lo que no se tiene y lo que está por acabarse (si está en oferta se puede comprar).
Consumo Inteligente
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Algunas recomendaciones para mejorar las finanzas personales:
