Pendientes. El precio, las lluvias y las plagas que éstas traen, tienen nerviosos a los productores.
Mientras que cientos de productores de melón y sandía sufrieron pérdidas por no poder cosechar y vender a causa de las lluvias del fin de semana, los forrajeros de Matamoros se encuentran motivados por la buena producción que las precipitaciones significan.
Contradicción del clima
"La planta crece mucho mejor y más rápido, lo que significa mayor producción de forraje en menos tiempo a diferencia de cuando se riega", comentó el director de Desarrollo Rural y Fomento Agropecuario Municipal, Arturo Grana Loera.
Asimismo, el representante de los campesinos en el municipio, comentó que los forrajeros auguran una buena captación de utilidades con el clima lluvioso.
Sin embargo, explicó que para los productores de melón, algodón y sandia las lluvias son malas, porque además de retrasar el corte por los lodazales, el fruto que ya había sido cortado, es más propenso a echarse a perder, por la humedad que se mezcla con el intenso calor.
A pesar de que no se han presentado a solicitar algun apoyo, la Dirección de Desarrollo Rural estima que ya se tienen mermas a causa de las lluvias, así como tiene ya sus beneficios.
Melón y sandía con pérdidas
Problema
Arturo Grana Loera explicó que a pesar del atraso para cosechar y vender, el precio que ha mantenido el melón de 80 centavos a 1.20 pesos es otro factor que merma.