Durante la ceremonia del XX aniversario del Instituto, el consejero presidente plantea un cambio cultural que exija la rendición de cuentas a los poderes públicos. (Archivo)
En medio de críticas a la Reforma electoral, los nexos partidistas de consejeros y llamados a responder a presiones contra el Instituto Federal Electoral (IFE), el consejero presidente, Leonardo Valdés, convocó a los sectores del país para la siguiente década sea la consolidación del organismo con una ciudadanía plena y más austera dentro de un pacto social, estable, incluyente y equitativo.
Durante la ceremonia del XX aniversario del IFE, Valdés propuso un cambio cultural que exija la rendición de cuentas a los poderes públicos y asuma la corresponsabilidad en el desarrollo cotidiano del país.
"Fomentemos el ejercicio de los valores fundamentales para impulsar el pacto social que le da sustento a México, los logros en esta materia, será la base de la estabilidad política de mañana.
"En 20 años, transformamos nuestro sistema político, construyamos ahora, la ciudadanía social, civil y política que consolide esa transformación; desarrollemos un pacto social más incluyente, más estable y más equitativo", indicó.
Acompañado de seis ex presidentes del IFE, ex consejeros ciudadanos, magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), representantes de partidos políticos, Valdés propuso que se fijen objetivos y "respetemos las reglas, consolidemos al IFE para que los beneficios del cambio político sean disfrutados por todas y todos los mexicanos, para que la democracia sea, una vez más, el motor de nuestra historia".
El ex consejero presidente Luis Carlos Ugalde consideró que el mejor festejo que puede hacerse, es asumir un compromiso público, para proteger al IFE, del intento de algunos partidos políticos que usan la presión y el ataque contra el IFE y de la regulación que le impone una sobrecarga de tareas administrativas y litigios interminables.
"Pero lo más importante, lo más relevante es proteger al IFE de su propio protagonismo, porque ese protagonismo y visibilidad, sólo refleja la falta de compromiso de los partidos con la legalidad.
"Un IFE muy activo ha sido necesario para contener los excesos y abusos de muchos actores políticos en las últimas dos décadas. Si los políticos actuaran con responsabilidad político y apego a la legalidad que ellos mismos aprueban, el IFE sería más discreto y eficaz", aseveró Ugalde.
Esteban Moctezuma, quien ocupó la presidencia en el IFE por haber sido secretario de Gobernación, subrayó que ha llegado el momento de romper con el reparto de cuotas entre los distintos partidos políticos en el nombramiento de los consejeros ciudadanos.
"Mucho ayudaría, que al dejar su encargo, los consejeros se vieran impedidos de tener cualquier nombramiento en la dirección de cualquier partido político, en cualquier alto cargo gubernamental o estatal, o ser electos por un partido político para cargos de elección popular.
"Ya no es válido el eslogan de que los costos de la democracia los deba de asumir exclusivamente el ciudadano y si estamos hablando en serio, estos costos también los podrían asumir los representantes ciudadanos", añadió Moctezuma, quien actualmente ocupa un cargo directivo en Televisión Azteca.
Para Moctezuma, la Reforma de 2007 colocó la libertad de expresión ciudadana en una celda entre la imposibilidad de utilizar medios electrónicos para expresar libremente sus puntos de vista sobre candidatos o partidos políticos, "como ocurre con toda naturalidad en la mayoría de los estados democráticos".
"Por lo que se ha avanzado, por los tropiezos dados y las necesidades ciudadanas de libertad y democracia, debemos empoderar a la ciudadanía en el tema electoral, debemos invertir más en educación democrática", abundó.
Moctezuma, quien ocupó el cargo en el gobierno de Ernesto Zedillo planteó escoger a los próximos consejeros ciudadanos por medio de una consulta a organismos intermedios de la sociedad, ya sean colegios, barras, academias, de manera abierta y transparente para "evitar el tufo de la partidocracia".
El senador del Partido Acción Nacional (PAN), Santiago Creel, resaltó que al haber concentrado la transición política casi exclusivamente en el ámbito electoral, "exacerbó la competencia , polarizó a los actores políticos ye vitó para avanzáramos en una reforma política de fondo".
"Produjo acuerdos equivocados, alentamos la fragmentación política, otorgamos multimillonarios recursos para sostener burocracias partidistas y para malgastar el dinero de las elecciones", añadió Creel, quien fue consejero del IFE.
Dante Caputo, quien encabezó la comitiva de la Organización de Estados Americanos (OEA) que observó los comicios federales, enfatizó que en el IFE hay "una razonable autonomía, porque esto no es Alicia en el país de las maravillas".
"Fue jefe de la misión en México y vi las presiones de aquellos días, me parece que esa transición ese triángulo de las Bermudas y además, con una autonomía razonable, es muy importante", expresó Caputo.
El senador del PRD Arturo Núñez, artífice de las conformación del IFE, planteó la necesidad de concretar reformas legales, como el derecho de réplica y la reglamentación del artículo 134 de la Constitución, además de que debe enfrentarse los nuevos retos: el dinero ilícito y el rebase de topes en las precampañas y campañas.
"Hay que evitar la compra del voto hasta donde se puede desde el ámbito electoral y hay también que cuidar la renovación del Consejo General del IFE.
"El IFE cumplirá su misión histórica cuando deje de ser necesario para México, cuando la confianza plena esté acreditada y la normalidad democrática impere entre nosotros", indicó Núñez.