Visita. El canciller vaticano Dominique Mamberti llegó el martes a Cuba.
El canciller del Vaticano Dominique Mamberti aplaudió el diálogo abierto entre el Gobierno y la Iglesia Católica de Cuba, que permitió la excarcelación de un disidente enfermo y el traslado de otros a centros penitenciarios más cercanos a sus familias.
"Uno de los objetivos mayores de la diplomacia de la Santa Sede es la de favorecer el diálogo entre las iglesias locales y autoridades de los distintos países", expresó ayer durante una rueda de prensa.
"Nos felicitamos por diálogo que está ahora en curso y espero que se fortalezca también con mi visita", dijo. "Pienso que es muy importante... ver los frutos".
Para el canciller cubano Bruno Rodríguez, también presente en la conferencia de prensa, la comunicación entre la Iglesia Católica y el Gobierno en este momento es "fluida" y "profunda".
Dijo que el Gobierno aprecia "el papel constructivo de la Iglesia" en la temática de los disidentes. "Vemos todos las condiciones para que en plena observancia de la Constitución cubana... continúen estos fructíferos intercambios".
Mamberti arribó el martes por la noche a la isla y además de su agenda con el GAobierno -que coincide con la celebración del 75 aniversario de las relaciones entre Cuba y la Santa Sede- participará en la X Semana Católica, un foro de debate al interior de la Iglesia sobre temas sociales de la isla.
Conversaciones entre el presidente Raúl Castro y el arzobispo capitalino, cardenal Jaime Ortega, permitieron la excarcelación del disidente enfermo Ariel Sigler y el traslado de otros a penitenciarías cercanas a sus hogares para tener más contacto con sus familiares.