Una baraja de cartas del siglo XVII, realizada en plata y perteneciente en primer lugar a la Familia Real española y después al segundo presidente constitucional de Uruguay, Manuel Oribe, se vendió por 554.500 dólares en una subasta en la sede neoyorquina de Christie's.
La baraja, la única del mundo realizada en plata que se mantiene completa, está formada por 52 cartas y presenta un perfecto estado de conservación.
Entre las curiosidades de este juego de naipes destaca que una de las cartas lleva la firma del artesano que la confeccionó, Michael Frömmer, de Augsburgo, y que está fechada en el año 1616.
Con su salida al mercado, el juego, que hasta ahora era de propiedad de un descendiente del general uruguayo Manuel Oribe (1792-1857), superó el precio fijado por la casa de subastas, situado entre 150 mil y 250 mil dólares.
De esta manera, la baraja de cartas quedó como una de las piezas más caras de la subasta dedicada a objetos de plata.
Según Christie's, el juego de cartas perteneció a la Familia Real española y fue la infanta Carlota Joaquina de Borbón (1775-1830) quien se las regaló a Josefa Oribe y Viana de Contucci, antepasada del que, hasta ahora, era su dueño.
La infanta Carlota era hija del rey Carlos IV de España y estaba casada con el rey Juan VI de Portugal y Brasil (1767-1826).
Las cartas llegaron así hasta Oribe, que presidió Uruguay de 1835 hasta 1838, y permanecieron desde entonces en la familia.
Los juegos de cartas de plata fueron parte esencial de los gabinetes de curiosidades de nobles y comerciantes durante los siglos XVI y XVII, en los que se reunían los objetos más variados, desde obras de arte a instrumentos científicos.
A pesar de su popularidad entre la nobleza, actualmente sólo se conservan cinco barajas en plata y la subastada en Christie's era la única que todavía tiene todos los naipes.
