Centro de Desarrollo para Personas Ciegas y de Visión Baja
Alianzas Estratégicas de Optometristas
Durante un año ocho meses, he trabajado en Ver Contigo en el área de Atención Temprana con niños ciegos y de visión baja de cero a tres años de edad.
Un trabajo lleno de retos, de nuevos conocimientos, de experiencias y de satisfacciones.
Son múltiples experiencias dibujadas en sonrisas, en logros, en esfuerzo y dedicación que me han entregado cada uno de los pequeños.
No olvidaré el día que entré a Ver Contigo. Como toda estudiante recién egresada teniendo el entusiasmo por aprender. Nerviosa, preocupada, pero siempre teniendo la convicción de que podía hacer un buen trabajo, claro de la mano de profesionales capacitados que me apoyaron en este camino.
Sin olvidar a la persona que creció junto a la profesional, las experiencias laborales siempre son importantes, pero las personales te ayudan a crecer de forma excepcional. Y en este caso fue así. Hoy digo hasta luego. Me despido de los niños, de los papás, de mis compañeros, llevando recuerdos que estarán escritos en mi corazón. Hoy digo hasta luego no sólo como una estudiante, sino como profesional que se fue creando en el transcurso de cada día, en cada terapia y en cada lectura.
Es difícil decir adiós, casi imposible. Más cuando los niños de Atención Temprana te acogen con una sonrisa, un balbuceo o una palabra nueva. O cuando los papás escuchan atentos cada indicación dada por ti o cuando, preocupados, preguntan cómo va su niño. Teniéndote la confianza de los consejos y sugerencias que les puedas dar.
Por eso es un hasta luego, porque el compromiso que adquirí no se borra. Digo hasta luego a mi primer trabajo, a mi primera experiencia laboral y personal. Parto a algo nuevo donde entraré con la misma energía y ganas de aprender que cuando ingresé a Ver Contigo, la gran diferencia es que me voy con más herramientas, conocimientos y una enriquecedora experiencia.
Quiero aprovechar este espacio para agradecerle a todos los que formaron parte de este crecimiento, con consejos y palabras de aliento.
Gracias a los directivos por la confianza y oportunidad de trabajo.
A los papás por su entrega y compromiso que son parte fundamental de mi crecimiento. Sé que será difícil esta despedida, les pido paciencia y confianza con la persona que estará trabajando con sus niños como me la proporcionaron en su momento a mí.
A los niños por llenar y engrandecer mi corazón, estaré al pendiente de cada logro.
A mis compañeros por brindarme su amistad compañía y conocimientos. Fui parte de un gran equipo les deseo lo mejor.
También dedico este artículo a mis compañeras que, como yo, dicen hasta luego, sé que su vida estará llena de éxitos.
A mi familia por su acompañamiento en el andar de mi vida y por apoyarme en esta nueva etapa.
Emprendo un nuevo viaje en donde seguiré aprendiendo. Estoy convencida de que cada día podemos ser mejores, y en Ver Contigo me topé con personas que me enseñaron a siempre estar en constante crecimiento, me apoyaron y me ayudaron a ser mejor cada día.
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