Noticias importantes para Gómez Palacio se esperan este lunes en la Suprema Corte de Justicia, donde los ministros revisaron la semana pasada, con casi un año de retraso, la controversia constitucional que presentaron partidos de oposición contra la designación del alcalde Mario Calderón, que entró a relevar al ahora curuleco Ricardo Rebollo. La controversia reclama como inconstitucional los nombramientos hechos por el Congreso del Estado pues se habrían pasado por el "Arco del Triunfo" la norma que contemplaba presidentes municipales suplentes, electos con la planilla, que cubrirían ausencias definitivas de los titulares.
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Nuestros subagentes en la Corte comentan que en la sesión del jueves los ministros se inclinaron por declarar inconstitucional las designaciones en el Congreso, lo cual pondría en duda la legitimidad de los alcaldes sustitutos nombrados hace un año. Como se recordará, la polémica se armó cuando el gober Ismael Hernández Deras ordenó al Congreso pasar por alto a los suplentes, que en el caso de Gómez Palacio se trataba de Fermín Cuéllar. La controversia también trata el caso de Durango, donde Carlos Matuk López sustituyó al también curuleco Jorge Herrera Caldera, por encima del suplente. En la discusión, los ministros opinaron que las designaciones contravienen normas constitucionales y atentan contra los municipios. De hecho, el ministro Arturo Zaldívar habló de “una simulación burda de intervención del Congreso en la autonomía de los municipios”. La votación fue pospuesta para el lunes cuando será retomada por los ministros, que incluso acordaron resolver el caso Durango antes que discutir los amparos contra el IETU, por lo que ahora resulta que el estado es más urgente que los impuestos (quizá porque se trata de taparle cola al Gober). Pero si bien la Corte se inclina por validar la controversia, hay desacuerdo entre los ministros por sentenciar si el efecto sería retroactivo, es decir, si los alcaldes serán desconocidos. De cualquier forma, sería un duro golpe a don Ismael y tendría consecuencias importantes en las próximas elecciones. El golpe sería mayor si los alcaldes son desconocidos, pues en el caso de Gómez Palacio, el Municipio habrá tenido cuatro alcaldes en tres años.
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Y hablando de las elecciones en Gómez Palacio, nuestros subagentes reportan una reunión entre el gober Ismael Hernández Deras y el ex alcalde Carlos Herrera. Al parecer, dicen, don Ismael habría comentado con don Carlos la posibilidad de lanzar a su hija, la ex diputada Leticia Herrera Ale, como candidata del PRI a la alcaldía que ya ocupó de 2001 a 2004. Al parecer la situación del Municipio es tan precaria que el Gober no tiene buenos “gallos” para lanzar frente a la posible coalición PAN-PRD que llevaría de abanderado a Augusto Ávalos, quien perdió la elección hace tres años. Para don Ismael tuvo que haber sido un trago amargo tocar el tema con quien le peleó la gubernatura hace seis años. Pero los subagentes comentan que al Gober no le fue bien, pues don Carlos lo mandó a freír espárragos. Vaya usted a saber qué tanto haya de verdad en estos chismecillos, pero es lo que se rumora al otro lado del Nazas.
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El gober Humberto Moreira regresó a Torreón esta semana a supervisar los trabajos de “rescate” de la ciudad y a anunciar nuevas obras y apoyos para que nadie diga luego que no pelaba al Municipio. Nuestros subagentes reportan una interesante reunión con empresarios de Fomec, a quienes les anunció una nueva política de estímulos para atraer inversiones, bajo la cual las exenciones de impuestos o entrega de apoyos económicos ya no tendrán que ir a regatearse a la peronera capital con funcionarios de las secretarías de Finanzas y Fomento Económico que tenían por costumbre echar las solicitudes a los cajones. Según el nuevo esquema, tanto Fomec como la vicegubernatura de Desarrollo Regional y el Municipio podrán otorgar directamente a inversionistas exenciones en los impuestos sobre nóminas y predial, así como disponer de una bolsa de dinero para atender solicitudes de infraestructura. Este es el esquema que funciona en Saltillo donde el “Gobierno de la Gente” prácticamente opera como autoridad municipal y que ha permitido a la capital atraer inversiones de manera desproporcionada en comparación con La Laguna. La nueva política definitivamente es un avance positivo, aunque el problema es que no ha sido acompañada de proyectos sobre infraestructura que falta, como abasto de agua, energía y comunicaciones. Pero la pregunta de fondo es ¿por qué no se había hecho antes? Y la respuesta es seguramente la que usted estimado lector está pensando.
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La gran sensibilidad social mostrada por los nuevos jefes en Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Torreón, que llegaron corriendo empleados y deteniendo la entrega de apoyos para que nadie los molestara, siguió vigente en los últimos días. Resulta que tras recular (así se dice) en el despido masivo de empleados, la nueva dirección encabezada por Carlos Caballero empezó un cese gradual y a muchos que se quedaron les regatearon la primera quincena del año, que no les fue pagada hasta el día 20 y con un recorte. Nuestros subagentes comentan que se trata de una forma de presionar a los empleados, algunos de los cuales tienen más de diez años trabajando para que mejor se vayan. El objetivo es que don Carlos tenga oportunidad de colar ahí a miembros del equipo del alcalde Eduardo Olmos quizá para agradecerles los servicios prestados en campaña. Por supuesto que los funcionarios recién llegados no se vieron sometidos a los recortes de sueldo y retraso en los pagos. De hecho, se comenta que al menos cinco nuevas funcionarias que entraron como coordinadoras se están despachando sueldos de hasta treinta mil pesillos cada una. El colmo es que, en la prisa por correr empleados, los nuevos jefes de área están pidiendo a los mismos despedidos que capaciten a quienes entrarán como reemplazos, pues los nuevos no tienen idea de cómo se manejan los programas y servicios del DIF. Resulta curioso que sea el DIF, una de las áreas mejor vistas de cualquier administración, donde el nuevo alcalde tiene más problemas. Al parecer la dependencia va seguir dando de qué hablar y es cuestión de tiempo antes de que la falta de prudencia de la nueva directiva, combinada con la falta de experiencia de los nuevos funcionarios, empiece a hacer estragos en la red de servicios sociales tan necesaria en estos momentos.
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Nuestros subagentes disfrazados de tránsitos mordelones comentan que ya se viene el primer cambio en la flamante administración municipal. Se trata del director de Tránsito y Vialidad, Pablo Villalobos, quien no formaba parte del equipo del nuevo jefazo de Seguridad Pública, Carlos Bibiano Villa. Se dice que el alcalde Eduardo Olmos pretende dejar toda la responsabilidad operativa de la Policía municipal en manos del General Villa y quitarse de broncas (éstas le llegarán solitas luego). En su relevo vendrá una importación de Gómez Palacio, pues el jefazo de Tránsito allá, Víctor Dabdoub, cruzará el río. Don Pablo, quien fue pieza fuerte de la “burbuja” del ex secretario de Gobierno, Raúl Sifuentes, había sido rescatado por don Lalo en el área de Protección Civil del Estado y parece que ahora se encargará de esas tareas en el Municipio. Falta por ver qué sabe don Pablo de Protección Civil si en las últimas emergencias en La Laguna, a causa de inundaciones, había brillado por su ausencia.
