El fallo del Tribunal Federal Electoral que avaló las elecciones municipales de Gómez Palacio y Durango capital llevó a los “alianceros” del PAN, PRD y Convergencia a comprar más veladoras para ponerle a la Virgen pidiéndole que le haga el favor al ex candidato a gobernador José Rosas Aispuro, pero las nubes se ponen cada vez más negras en el horizonte opositor. La decisión del Tribunal echó por tierra, por “infundados” e “ineficaces” los argumentos de la alianza para pedir la anulación de las elecciones municipales, que son los mismos que usan para impugnar la elección para la gubernatura.
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Como se sabe, la acusación de la alianza “Durango nos Une” tiene tres ejes: la supuesta parcialidad del órgano electoral a favor del PRI, la intervención del gober Ismael Hernández Deras a favor de su “delfín” Jorge Herrera Caldera, y los hechos violentos registrados el día de la elección, como balaceras y robo de casillas, atribuidos por la coalición a policías estatales y pistoleros a sueldo del gobierno. Nada de esto, dijeron los magistrados, se pudo comprobar de manera tal que demuestre un impacto negativo en el resultado de la elección. De ahí que nuestros subagentes, que dicen ser abogados, concluyan que si el Tribunal no compró los argumentos para las elecciones de alcaldes, tampoco los comprarán para la de gobernador. Sin embargo, en el PAN y el PRD aún se aferran a un hilo de esperanza con base en dos factores. Uno es que el fallo que sostuvo las elecciones municipales fue dado por la Sala Regional de Guadalajara y la decisión sobre la gubernatura la tomarán los magistrados de la Sala Superior del Tribunal, aunque se ve difícil que vayan a discrepar de sus colegas tapatíos. El otro factor es que el margen de diferencia en la elección estatal fue más cerrado que en las municipales, lo que llevaría a los magistrados a ser más minuciosos en la revisión del caso. El fallo se espera para la próxima semana, pues el límite es el 14 de septiembre. Por lo pronto, anoche Rocío Rebollo se sentó en la silla en Gómez Palacio y Adán Soria hizo lo propio en Durango, mientras que a don Jorge ya le palpita cada vez más fuerte el corazoncito para sentarse en la silla grande del Palacio de Zambrano.
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En la peronera capital, el gober Humberto Moreira y su equipo andan muy contentos con la encuesta de la firma Gabinete de Comunicación Estratégica que midió la popularidad del presidente Felipe Calderón y los gobernadores. Don Humberto se llevó el primer lugar de todos, al resultar como el mandatario más confiable. Sin duda el Gober pensará que esto se debe al tren de obra y promoción que trae por la entidad y que su nivel de popularidad facilita una sucesión a modo (fraternal, de preferencia). Pero nuestros subagentes indican que no debe confiarse tanto, pues la encuesta puede resultar engañosa. Sólo hay que recordar que en años anteriores, los gobernadores Mario Marín, de Puebla, y Ulises Ruiz, de Oaxaca, estaban muy arriba en los índices de popularidad, pero este año les fue como en feria cuando el PRI perdió las elecciones en sus estados y se desplomaron en la encuesta. También hay que ver que los gobernadores de Durango, Ismael Hernández Deras, o de Veracruz, Fidel Herrera, tuvieron altos niveles de popularidad, incluso por arriba del “preciso” Calderón, y casi pierden las elecciones. Además hay otros datos que vale la pena observar. Por ejemplo, que este año un mayor porcentaje de gente que el año pasado opina que el gober Moreira trabaja más para su partido que para los intereses de los ciudadanos. O que más gente en esta encuesta piensa que don Humberto ha dejado de colaborar con el Gobierno Federal y jala más agua a su molino. Pero nada de esto debe servir de consuelo a los panistas que quieren una alianza opositora para la elección del año que entra. La encuesta les da sólo 15 por ciento de preferencia contra 45 por ciento para el PRI, pero un 78 por ciento opina que el tricolor va a ganar la gubernatura. O sea que van a tener que jalar en serio si no quieren que se les vaya el tren por otra vía.
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El PRI en Coahuila ha resultado ser candil de la calle y oscuridad en la casa en el tema del gasto público. Un día sí y otro también los curulecos del tricolor, al son de la voz cantante del hermano cómodo Rubén Moreira, gritan a los cuatro vientos que el Gobierno Federal mantiene un subejercicio en su gasto y que a ocho meses del año han gastado menos de la mitad. Pero he aquí que la administración del alcalde Eduardo Olmos en Torreón maneja un subejercicio mucho peor. Según el último reporte, el Municipio ha ejercido apenas el seis por ciento de su presupuesto para inversión pública (obras y otros programas) que en 2010 se fijó en 184 millones de pesillos. O sea que este año sólo se han gastado seis centavos de cada peso presupuestado, aunque buena parte fue para remodelar la oficina del Alcalde, y es como que no debe contar, pues la ciudadanía no le ha sacado mucho jugo. Como que no checa entonces eso de ver la paja en el ojo ajeno. Lo más probable, dicen nuestros subagentes, es que las huestes de don Lalo se han fijado más en cómo usar el presupuesto para la nómina (ahí sí manejan entusiastamente un sobreejercicio) porque les da mayor rentabilidad, y que el gasto en obra les tiene muy sin cuidado. Ahí está, por ejemplo, el caso de la funcionaria que cobra en Atención a la Juventud, donde nadie la conoce porque en realidad trabaja en el PRI. Y es que al parecer, la administración de don Lalo confunde el Año del Bicentenario con el Año de Hidalgo. Pobre Torreón.
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Nuestros subagentes en el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento comentan que el gerente, Jesús Campos, ya le prensó los dedos al contralor Mario Cepeda con el asunto de pagos de obras, luego de que se reportara que don Mario y su gente se estaban pasando de vivos con proveedores. Se dice que los pagos ya se manejan desde la gerencia de Finanzas, la única área donde don Jesús pudo meter a su gente, mientras que don Mario ya no tiene tratos con proveedores y no quiere recibir a nadie. Sin embargo, dicen los subagentes, eso no significa que su equipo dejó de hacer de las suyas. Se comenta que algunos proveedores que tenían pagos pendientes de la pasada administración y empezaron a cobrar directamente en Finanzas, ya recibieron llamadas de subordinados del contralor para que “agradezcan” el favor de haber agilizado esos pagos. El problema es que hasta ahora no ha salido ningún “valiente” dispuesto a darle una exhibida a los funcionarios que andan de mañosos. En la Presidencia Municipal dicen que los ataques a don Mario son injustos y que el pobre contralor carga con la mala fama de su padre, el veterano líder priista Mario Cepeda. Pero hay otros que dicen que hijo de tigre...
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Ahora que nadie escapa de la delincuencia, nuestros subagentes en Gómez Palacio comentan que recientemente le robaron el carro a un agente del Ministerio Público Federal que estaba estacionado afuerita de las oficinas de la Procuraduría General de la República. A ese grado de descaro han llegado los malandros en La Laguna, sin que haya autoridad capaz de detenerlos. Pero la paradoja de que el robo haya sido en la PGR no se acaba ahí, sino que también pone de manifiesto el hecho de que la dependencia federal apenas existe en La Laguna pues su presencia en la lucha contra el crimen ha sido poco menos que nula. Al menos ahora el agente del MP en cuestión va a tener una probadita de lo que es la procuración de justicia en estos lares.
