Gran noche. Así se vivió ayer el concierto en el Estadio de la Revolución.
Después de un mensaje de apoyo para los coahuilenses damnificados por el huracán "Alex", el Capitán Rubén Darío Estada, Director Artístico de la Orquesta Sinfónica de la Secretaría de la Defensa Nacional, movió su batuta para dar inicio al Magno concierto Bicentenario, anoche en el Estadio de la Revolución, donde miles de laguneros disfrutaron de un espectáculo musical que recorrió la historia de México a través de sus principales compositores.
Perfectamente afinados, la disciplina castrense que lucieron sobre el escenario y la precisión de los instrumentos, los músicos militares entonaron el Himno Nacional en un enorme escenario ante la mirada de miles de laguneros que se pusieron de pie en la nublada noche lagunera.
Un narrador trasladó a los asistentes al Estadio de la Revolución a las luchas de Independencia con la Suite Bicentenario. Obra de los compositores Rubén Darío y R. Marrero, que abrió el espectáculo escénico.
Sin duda alguna si una disciplina artística ofrece un sentido de identidad es la música. Así lo demostró el ensamble integrado también por la Banda del Ejército, los coros de la Sedena y el mariachi de la misma institución, quienes pusieron la piel de los asistentes "chinita", con la interpretación de obras como "El Viajero", "A tabasco", "Canción Mexicana" y "Canción Mixteca".
Sonrisas y aplausos estuvieron constantes a lo largo del concierto donde se intercalaban las agrupaciones, hasta que salió el Mariachi de la Sedena, para hacer de todo el Estadio Revolución, un coro que se unió a los músicos para catar "Cielito Lindo".
Torreón respondió y los militares lo notaron, fue el cuarto lugar en el que se llevó a cabo este concierto que se realizará en 12 estados de la república y a pesar de la amenaza de lluvia y algunas gotas de agua que intentaron apagar la fiesta, el público permaneció en sus asientos.
Uno de los momentos más de mayor efusión fue cuando una voz femenina, anunció que de la importancia del desarrollo ferroviario de La Laguna, se originó la obra que seguía en el programa, "De Torreón a Lerdo", del maestro González, la gente gritó, se emocionó y siguió el ritmo con las palmas hasta el final de la popular obra.
Un concierto que además de mostrar la calidad musical de los integrantes de las orquestas de la institución castrense, dejo ver la capacidad que tiene la música de trasladar a familias enteras a un panorama cultural en el marco de los festejos del Bicentenario. Aunque el ambiente de la noche se tornaba más intenso cuando las dos voces del Mariachi aparecían en escena.
Al final del concierto un juego de luces pirotécnicas despidió a los laguneros y alegró la nublada noche, enmarcada por la amabilidad de todo el personal militar que hizo parte de la infraestructura del espectáculo, quienes desde el inicio del mismo recibieron al público con una sonrisa, dejando ver el lado amable y sensible del Ejército Mexicano.
Amabilidad del Ejército
Uno de los aspectos que enmarcaron anoche el Magno Concierto Bicentenario que ofreció en el Estadio Revolución el ensamble de la Orquesta Sinfónica de la Secretaría Nacional de la Defensa, los coros, el mariachi y la Banda del Ejército, fue la amabilidad con la que el total de los miembros del Ejército Mexicano recibieron a los laguneros.
"En medio de tantas noticias negativas, qué bueno que se realice este tipo de conciertos, donde además podemos venir en familia. Debemos agradecer a los soldados, que se portaron muy bien y dejaron ver cosas que uno nunca ve de ellos. Estas actividades son las que nos hacen sentir más mexicanos", dijo una señora, quien asistió al concierto en compañía de sus tres hijos, su esposo y dos nietos.
