Agentes estatal quedaron a cargo de la vigilancia de la jornada electoral, luego de que un centenar de policías municipales se declaró en paro laboral en demanda de un aumento salarial.
Los uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública del municipio de Huixtla, a unos 45 kilómetros de Tapachula, decidieron parar labores justo momentos antes de que se iniciara la apertura de las casillas electorales en esa localidad.
Previo al paro laboral, el gobierno municipal ofreció una serie de beneficios para los uniformados; sin embargo, los uniformados no aceptaron bajo la condición de que lo harán 'hasta que se cumpla todo nuestro pliego petitorio', indicaron.
Ese municipio, donde cada año se generan millones de dólares por la zafra de la caña de azúcar y el ganado, permanece bajo custodia sólo de personal de la Policía Estatal.