Guillermo Babatz, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), advirtió que esta dependencia se mantendrá "vigilante" para que la reactivación del crédito bancario se dé sobre bases sólidas.
En conferencia de prensa, el funcionario pronosticó que el financiamiento al sector privado cerrará el año con un aumento de 10%, mientras que en 2011, el incremento se estima entre 12 y 14%.
Insistió que hay optimismo sobre el desempeño de la actividad bancaria, debido a que retomó la senda de crecimiento.
Reconoció que entre 2008 y 2009 se materializó el riesgo por una originación inadecuada de tarjetas. "Y eso todavía está presente en las instituciones".
Sin embargo, con las nuevas reglas para las reservas de plásticos se determinó que cuando se autorice un préstamo riesgoso, las instituciones tendrán que crear más provisiones.
Por ejemplo, si una entidad otorga un financiamiento a una persona con varias tarjetas se le penalizará en las reservas o si se otorga una línea de crédito más alta a la de su capacidad de pago o de ingresos también se castigará a los intermediarios con más provisiones, entre otros factores. Aclaró que una parte importante en la reactivación del crédito al consumo proviene del segmento de nómina, lo que revela un cambio en la composición.
Babatz destacó que se observa una mayor centralización de los bancos en el otorgamiento del crédito.
"Desde hace dos años trabajamos en mejorar la información que se envía al Buró de Crédito; todo, ello genera que la expansión de los préstamos sean sostenibles y se evite sobreendeudar a las familias", manifestó.
Babatz reconoció que la CNBV realiza la reclasificación de las cuentas de captación en México, a fin de dividirlas en transaccionales y de ahorro; este proceso concluirá el próximo año.
Es relevante definir lo que son las cuentas de ahorro y las transaccionales.
"Y es importante que el público lo entienda bien, incluso, con la información que los bancos ofrecerán, las personas podrán comparar y mudarse a productos que les generen rendimientos", estableció.
Insistió que cuando los clientes se percaten que en una cuenta transaccional no obtiene rentabilidad, tendrá que cambiarse a una de ahorro.
Aclaró que la cuenta transaccional será donde se deposite la nómina y los saldos promedio tendrán que ser relativamente bajos; en cambio, la cuenta de ahorro se deberá utilizar para depositar el dinero con un fin específico.
