Foro. Carlos Salinas, ex presidente mexicano en el Foro 'México, entre el Norte y Sur', organizado por la Fundación Botín, en la Residencia de Estudiantes de la ciudad de Madrid.
El ex presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, habló de las próximas elecciones presidenciales de 2012, y aunque no quiso responder sobre qué pasará "porque todavía falta mucho tiempo", sí dijo que "ante los problemas que estamos viviendo en México, retos tan formidables, hay que concentrarse en las soluciones".
Al participar en el foro México, entre el norte y sur, organizado por la Fundación Botín del Banco de Santander, durante el cual analistas, economistas y políticos mexicanos dialogan sobre el futuro de nuestro país, Salinas dijo que "hay mucho que hacer, los mexicanos están afrontando retos muy complicados y lo que están reclamando son respuestas, soluciones a los problemas", explicó.
En este sentido, cuestionado sobre las eventuales alianzas entre los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) en el estado de México, eludió responder si está a favor, y se limitó a decir que "la respuesta la tendrán los votantes".
SIN AUTOCRÍTICA Tras pronunciar en el foro un discurso exento de autocrítica, en el que se limitó a resaltar los logros de sus seis años de gobierno, y en el que una vez más acusó al ex presidente Ernesto Zedillo de no haber concluido sus reformas económicas, Salinas respondió a algunas preguntas.
Se refirió a la situación de violencia que se vive en México; lamentó la masacre ocurrida en Ciudad Juárez, en la que 14 adolescentes murieron asesinados el pasado viernes cuando se encontraban en una fiesta, y en este sentido criticó la "falta de oportunidades que tienen los jóvenes".
A su llegada el ex presidente fue recibido por dos jóvenes que portaban pancartas en las que se podía leer: "Carlos Salinas, asesino, corrupto y traidor". Preguntado sobre ello, aseguró nervioso que él ya había rendido cuentas como presidente "en los libros que he escrito, en los que se afirma la verdad sobre mi gobierno".
Durante su ponencia, Salinas alabó su gestión como presidente, etapa de la que destacó la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos y Canadá.
Un acuerdo del que desmintió una serie de estereotipos como que "arruinó a los trabajadores mexicanos" y propició la "migración masiva" a los países del norte.
"Gracias al tratado los trabajadores ganaron 40% más".
Por último el ex presidente subrayó que aunque México "tiene la capacidad de ser un puente entre el norte y el sur", el TLC es "un instrumento, no la panacea", y en este sentido subrayó la necesidad de llevar a cabo "las reformas que el país requiere", concluyó.