Vuelven los muertos vivientes
Las reglas son claras si es que deseas sobrevivir a una invasión zombie: correr rápido, no hacerte el héroe, no frecuentar campos nudistas, lo más recomendable, es hacerte amigo de un matón. Pero Woody Harrelson las interpreta a su manera. Cumple la primera, desobedece la segunda, la otra ni le interesa y, en la última, él es el asesino sin entrañas.
"Es gracioso ir cargándote muertos todos los días", dice este actor texano de 48 años.
Harrelson habla a tono con la comedia Tierra de Zombies (Zombieland), que se estrena el próximo viernes, en donde interpreta a un hombre solitario que se encuentra con un planeta tomado por muertos vivientes de todo tipo y cuya meta es encontrar pastelillos empaquetados.
Un día se encuentra con tres adolescentes (Emma Stone, Jesse Eisenberg y Abigail Breslin) de quienes, de la noche a la mañana, se convierte en protector y una especie de padre.
"Me encanta la comedia, es mi género favorito. Si un guión me hace reír, sé que el público lo pasará bien", dice en una conferencia de prensa internacional, a la que asisten cerca de 100 periodistas de todo el mundo.
Y vaya que tiene razón. Una de las escenas más hilarantes es cuando llega a un centro comercial, tañe su guitarra, aparece un zombie queriéndolo atacar y él lo recibe cual bateador de las grandes ligas. Descrito así podría parecer grotesco, pero en realidad esa escena, como otra donde a un zombie le dan un tiro de gracia, está cargada de humor negro.
LOCO DE ATAR
Harrelson mide 1.80 metros de estatura, es un ambientalista de cepa y defensor de la legalización de la marihuana. Y el típico texano cuando se pone sombrero.
En los ochenta participó en la serie televisiva Cheers y una década después, fue una de las figuras más predominantes del cine hollywoodense. Realizó Los Blancos no Saben Saltar, al lado de Wesley Snipes, como jugador de basquetbol y luego causó coraje a muchos fans de Demi Moore, cuando la vende por un millón de dólares en Una Propuesta Indecorosa.
Su papel en Asesinos por naturaleza, con Oliver Stone, fue su carta de acceso a Tierra de zombies, que se realizaría casi 15 años después.
"Luego de leer el guión, el único actor en el que podía pensar era Woody Harrelson", dice Ruben Fleischer, director del filme.
En Estados Unidos y España, donde ya se estrenó el filme, la actuación de Woody ha generado críticas favorables.
Hay quien lo califica como su gran regreso a las ligas mayores, luego de trabajar en largometrajes como 2012 y Siete Almas. talados, ropa tendida en lazos y mujeres zombies bailando en el interior de jaulas, lo que seguramente gustará.
Premiada
Tierra de Zombies llega con el antecedente de haber ganado el premio del público en el reciente Festival de Sitges, especializado en cine de terror, ciencia ficción y fantasía.
⇒ Durante los llamados, cerca de 100 extras eran maquillados como muertos.
⇒ Las playas de Cancún sirvieron para montar un set apocalíptico con autos y muertos.