El oso panda es uno de los animales en mayor peligro de extinción del mundo, debido a la dificultad que este mamífero tiene para reproducirse.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) anunció que invertirá 40 millones de yuanes (5.9 millones de dólares, 4 millones de euros) en los próximos tres años para el apoyo a la protección del hábitat del oso panda, el animal que precisamente es protagonista de su conocido logotipo.
WWF destinará ese dinero a un programa de conservación del lugar donde habitan estos animales en la cuenca superior del río Yangtsé, en las provincias occidentales de Sichuan, Gansu y Shaanxi.
La organización ecologista trabajará para "reducir los efectos negativos del turismo y la construcción de edificios" en estos hábitats, incluyendo bosques y humedales, ayudando también a los campesinos de la zona a "adoptar formas de subsistencia más sostenibles".
El oso panda es uno de los animales en mayor peligro de extinción del mundo, debido a la dificultad que este mamífero tiene para reproducirse (problema derivado precisamente de la pérdida de hábitat, que produce endogamia).
Actualmente hay unos mil .600 animales de esta especie en libertad.
Hay tres bases de cría e investigación de los pandas en Chengdu (capital de Sichuan), en la reserva natural de Wolong de la misma provincia, y en el zoológico de Pekín, aunque se está preparando la creación de una cuarta en la provincia de Shaanxi.
WWF y otras ONGs medioambientales como Greenpeace tienen presencia legal en China y participan en proyectos de cooperación estatales, situación que contrasta con la de organizaciones no gubernamentales dedicadas a los derechos humanos como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, cuya actividad en el país es prohibida por Pekín y suele desarrollarse clandestinamente.