Cerrados. Algunos comerciantes decidieron no abrir sus negocios ayer luego de que se registrara una balacera.
"Chin, ahora no vamos a tener clientes, ni modo vamos a tener que cerrar", dijo un comerciante luego de que policías realizaran tres detonaciones en la azoteas de uno negocio ubicados frente al Mercado Juárez, por la Blanco.
Asaltantes y policías abrieron fuego en la casa de empeño de la Fundación Dondé, ubicada sobre la calle Blanco, ayer minutos después de las 9:00 de la mañana. Algunos puestos comenzaban a abrir sus puertas mientras que otros tenían poco de haber llegado.
El pánico se apoderó de quienes transitaban a pie o en vehículo por las calles contiguas a la Blanco al iniciarse el fuego cruzado, por lo que, antes que llegar a sus destinos, prefirieron ponerse a salvo.
"Yo iba a trabajar y venía despistada por la Hidalgo, cuando iba a llegar a la Blanco, escuché los balazos y una persona de una zapatería que me vio me dijo que me metiera. Me metí y cuando nos asomamos estaba una señora tirada en el suelo y debajo de ella su hija, la estaba cubriendo de las balas", dijo Nancy, quien se dirigía a laborar.
Los comerciantes que ya habían abierto sus negocios, bajaron sus cortinas y se escondieron en el último rincón del local. Algunos decidieron no abrir.
"Cuando escuchamos los balazos nos metimos, pero uno de mis compañeros salió a bajar la cortina y por poco y le tocaba un balazo, mejor se metió", dijo Efrén.
Cuando el fuego terminó las personas salieron de sus escondites, mientras que los policías entraban a negocios y locales para revisarlos.
Un grupo de elementos se subió a las azoteas de negocios ubicados frente al mercado y se escucharon tres detonaciones. Esta vez los curiosos no se fueron. Algunos policías llegaron para desalojar, pero no lo lograron. Mientras esto sucedía comerciantes lamentaban la baja de clientela que este hecho violento les traería.
2 MUERTOS La balacera dejó dos muertos, uno era policía