Y los Zorros acabaron con su maldición en la Comarca

Hugo J. Castro

Torreón, Coah.- Un nuevo juego en el TSM, un nuevo caos a la llegada gracias al cuello de botella que se forma en la carretera, además de que varios autos se quedan a la orilla en el intento por llegar a la casa de los Guerreros.

En esta jornada todos los amantes del futbol se unieron para apoyar a Salvador Cabañas. Mantas de Guerreros y de los Zorros del Atlas para enseñar que en estos momentos todos confían y esperan que el paraguayo siga luchando por su vida, por eso en la pantalla se ve su imagen y la frase "¡Eres un Guerrero de la Vida!". El párroco de Todos los Santos, Víctor Gómez, dirigió un Padre Nuestro que los aficionados rezaron no sólo para Cabañas sino para todos los que estén peleando por vivir. "Va por ti Chava".

Comienza el duelo y por enésima ocasión Santos se va abajo en el marcador, gracias a un certero cabezazo de Miguel Zepeda, quien le demostró que "viejos los cerros". Un gol de puro colmillo.

Matías Vuoso trata de no meterse en líos, porque recuerda a Germán Arredondo.

A Santos le cuesta reaccionar, salvo pinceladas de Ludueña y Vuoso, pero que Barbosa defiende en el marco rojinegro. Los ataques albiverdes se topan con la muralla defensiva de los tapatíos, lo que va atrayendo un gris panorama, al tiempo que las nubes pasan encima del estadio.

Arce se quedó "enchilado" porque no le marcaron una falta que recibió y sí el penal que cometió. Botinelli mete el segundo tanto antes del descanso. Todo es confusión de aquí en adelante, al grado que los participantes del juego de activación no entienden y se saltan las reglas. La Guerrera y el Guerrero los surten de "guamazos" para que entiendan.

Sale Santos al terreno, Oswaldo alienta a las tribunas.

Atlas tarda en salir, como diciendo "esto ya se acabó".

Sacan a Arce y la molestia es tal que no le da la mano a Paco Torres. Romano mete todo el ataque que puede. Ischia, que le dio frío en la calva, mete un poco al camión. Una serie de fallas de los Guerreros fueron el preámbulo de lo que no sucedía en hace mucho tiempo, una derrota en casa. Pero Mariano Barbosa quiere hacerse el "vivo" y lo expulsan, Édgar Pacheco se pone de portero y Santos, como en juego de barrio, sólo logra meter un gol. Los Rojinegros se llevan un triunfo que cura a sus demonios de antaño, a lo mejor en este torneo sí se les hace ser campeones, luego de medio siglo de no serlo.