Ni la tierra, ni lo gastados que quedaron por las fiestas, ni el resentimiento por haber perdido el Campeonato pasado, ni el reclamo por una despedida para Jared Borgetti. El Corona lució al lleno de su capacidad en la jornada inaugural del Clausura 2011.
Y es que desde unas horas antes del encuentro frente a Atlante La Laguna se cubrió con un denso manto de tierra, que por arte de magia se esfumó a unos minutos de que empezara el primer partido de Santos como local.
Por culpa del terregal muchos la pensaron para asistir, pero al parecer de última hora se animaron, a juzgar por las decenas de personas que seguían ingresando ya iniciado el duelo.
Otros más la estuvieron pensando a lo largo de la semana. Después de los regalos de Navidad, la cooperación para la cena de Navidad, el estreno para Año Nuevo y el precio de la rosca de Reyes, quedaron muy gastados y por poco y no les alcanza para la entrada.
Poquito de aquí y poquito de allá, completaron el boleto y hasta la "cheve", las semillas y el lonche y aunque a muchos ya no les alcanzó para el abono de toda la temporada, cuando menos podrán contar que estuvieron en la primera jornada.
Tampoco faltaron los que dijeron que esta nueva temporada dejarían de asistir, porque después de haber perdido la final contra Monterrey en diciembre pasado, ya no merecía la pena seguir apoyando.
Afortunadamente para Santos Laguna, esa amenaza no llegó a mayores y si hubo quien pensara así, en el Territorio Santos Modelo no encontró eco.
Lo que sí encontró eco fue el reclamo por Borgetti, ex santista que apenas esta semana anunció su retiro de las canchas. "Jared, Jared, Jared" se escuchó desde la esquina nororiente desde el silbatazo inicial y volvió hacia el inicio del segundo tiempo, cuando mostraron una manta con la leyenda del 58.
La afición lagunera no olvida los 295 partidos en que el sinaloense vistió la playera albiverde, ni los 189 goles que anotó como Guerrero, mucho menos aquél de la final contra Necaxa en el Torneo Invierno 1996. Por eso exigieron a la directiva una despedida a la altura del dos veces campeón de goleo y máximo anotador en la historia del club.
Al final nada impidió la celebración. El terregal se despejó, el frío empezó y el Santos ganó. Dos goles a 1 es un buen marcador para empezar, que ilusiona más que nunca a los laguneros con la esperanza de que en 2011 sí se puedan coronar como campeones.
'Jared, Jared, Jared' se escuchó desde la esquina nororiente desde el silbatazo inicial y volvió hacia el inicio del segundo tiempo. Afición coreó a Jared Borgetti
