El próximo sábado, mil 300 delegados perredistas de todo México discutirán en el Congreso de su partido el método de elección del candidato presidencial y la política de alianzas para 2012.
Para ello, a partir de hoy lunes las corrientes del sol azteca intensificarán el debate sobre el mecanismo para definir al abanderado a la Presidencia de la República, pues hay división sobre si debe ser una encuesta o una elección abierta.
Fuentes perredistas afirmaron que si esta semana Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard no informan al partido que de manera formal han acordado uno de los dos métodos, llevarán el tema al Congreso para su discusión, pero la aprobación podría dejarse en manos del Consejo Nacional, que tendría que sesionar antes de octubre.
Hasta el momento, el Jefe de Gobierno del DF se ha pronunciado por que sea una encuesta, mientras que el tabasqueño se ha limitado a decir que está abierto a cualquiera de los dos métodos.
"Si de aquí al sábado ellos no dan luz verde, el tema sólo se discute en el Congreso y podríamos plantear como salida dejarlo en manos del Consejo Nacional; sin embargo, hay otros grupos que exigen definirlo este sábado", dijo un integrante de la Comisión Política Nacional.
Los grupos realizarán desde hoy reuniones formales dentro de la comisión organizadora del Congreso y encuentros políticos entre las corrientes con mayor fuerza para llegar a la sesión con el mayor número de acuerdos pactados.
El Congreso tendrá un costo para el partido de 12 millones de pesos y se efectuará en diversos salones del World Trade Center.
En el orden del día está contemplado aprobar un acuerdo para cambiarle de nombre a los órganos de dirección, con el fin de que sean compatibles con sus estatutos; fijar nuevas reglas para la afiliación de militantes, cuyo padrón es de un millón 700 mil; postergar la elección del Congreso y el Consejo Nacional, así como las dirigencias estatales y municipales; definir la política de alianzas; el método de elección de los candidatos a cargos de elección federal y estatal, y el plan para atraer el voto y la organización que deberá tener el partido en los próximos meses.
La discusión de los grupos también se centrará en si debe reabrirse el tema de las "amplias alianzas", que no descartan al PAN en la elección de 2012.
Al respecto, un bloque de corrientes, encabezada por el líder del partido, Jesús Zambrano, impulsa dicha propuesta, mientras que otras "tribus" exigen confirmar que no habrá coaliciones con el blanquiazul.
La intención de "Los Chuchos" es aprobar un acuerdo que, sin mencionar al PAN, deje abierta la puerta a una negociación con los panistas, y echar abajo un acuerdo de marzo del Consejo Nacional, con el argumento de que el Congreso es la máxima autoridad del partido.