Además. Julian Assange, fundador de WikiLeaks actualmente está demandado de acoso sexual.
Copias no censuradas del inmenso archivo de cables del Departamento de Estado norteamericano en poder de WikiLeaks circularon ayer jueves por toda la Internet, con lo cual un gran conjunto de fuentes quedaron expuestas a la vergüenza pública y posibles represalias.
En tanto, Washington negó haber cooperado jamás con el grupo y condenó a WikiLeaks por supuestamente poner en peligro la seguridad tanto del país como de informantes confidenciales.
Wikileaks ha culpado de la filtración al periódico británico Guardian, señalando que un periodista investigador había revelado la contraseña necesaria para acceder a los archivos en un libro publicado meses atrás. Periodistas del Guardian respondieron que fue la falta de seguridad en el sitio de Julian Assange lo que permitió poner los cables a la vista del mundo.
En un largo editorial en la internet, WikiLeaks acusó al periodista investigador David Leigh, del Guardian, de deslealtad, señalando que su revelación había puesto en peligro meses de "trabajo cuidadoso" emprendido por WikiLeaks para editar y difundir los cables. "Revoluciones y reformas están en peligro de ser derrotadas a medida que los cables inéditos llegan a contratistas de Inteligencia y gobiernos antes que al público", dijo WikiLeaks en su declaración.
Leigh negaron al diario Guardian haber cometido faltas, y la sucesión precisa de los acontecimientos a los que se refirió WikiLeaks quedó sumida en la confusión y las recriminaciones.
Se sabe desde hace tiempo que WikiLeaks perdió el control de los cables no editados incluso antes de su difusión. The New York Times y otros medios de prensa, incluida The Associated Press, han recibido copias de los mismos documentos independientemente de WikiLeaks. Pero esta es la primera vez que el catálogo completo de cables no editados llega a la Internet.