La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) manifestó su preocupación por el incremento en México de la producción de heroína de alta calidad, que es comercializada principalmente en Estados Unidos por organizaciones criminales mexicanas.
De acuerdo con el Informe 2010 de la JIFE, los grupos del crimen organizado mexicanos de traficantes de drogas han adquirido un porcentaje importante del mercado de heroína en la Unión Americana a costa de los grupos delictivos procedentes de Sudamérica.
Además -señala el documento que hace un balance de la situación mundial de las drogas- hay indicios de que en México se fabrica ilícitamente "heroína blanca" -de mayor pureza- que se distribuye en la región, pero que se consume por mercados muy selectos de Estados Unidos.
Antonio Mazzitelli, representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, criticó que México carece de los elementos tecnológicos, como los tiene Estados Unidos, que a través de sus satélites muestra las imágenes de las áreas sembradas para cuantificar la superficie total de cultivo de la planta de amapola, de donde se produce la heroína, pues según estimaciones de la JIFE, ésta asciende a casi 15 mil hectáreas.
Alejandro Poiré, vocero de seguridad nacional de la Presidencia, dijo que el gobierno ha erradicado más de 13 mil hectáreas de cultivo de estupefacientes y que en los últimos dos años el decomiso de drogas ha sido mayor en comparación con la pasada administración.
