El jueves pasado, en una maniobra de férrea disciplina partidista, el PAN reventó el quórum de la sesión de la Cámara de Diputados, en afán de impedir que la oposición en bloque votara un extrañamiento al Ejecutivo sobre la presencia del Ejército en una regasificadora de la firma estadounidense Sempra Energy en Ensenada.
La justificación frente al inaudito fue que la tropa había entrado a "meter orden" frente a la clausura de la planta almacenadora de gas licuado con capacidad de 320 mil metros cúbicos, conocida como Energía Costa Azul, decretada por el alcalde priísta Enrique Pelayo Torres.
Los sellos estaban respaldados por medio centenar de policías locales que decidieron no presentar resistencia para evitar un enfrentamiento. La vela en el entierro de la Cámara Baja es que ésta había apoyado en su momento la acción del alcalde local, ante lo que se ubica como presencia depredadora de la multinacional en agravio del corredor turístico más bello del mundo.
En lo que remite a un conflicto más entre la Federación y un gobierno local frente a lo que la primera ubica como acciones nocivas que ahuyentan a los inversionistas extranjeros del país, el ambiente se ha enrarecido al máximo. La paradoja del caso es que simultáneamente en Estados Unidos la agencia corporativa Interpol ha solicitado una "investigación discreta" en la presunción de un posible soborno que Sempra Energy le habría entregado al ex gobernador panista de Baja California, Eugenio Elorduy Walther, para permitir la instalación de la planta de la discordia.
De acuerdo al Ayuntamiento de Ensenada, el permiso de suelo otorgado por el presidente municipal anterior al actual, Jorge Antonio Catalán Sosa, violó la Ley de Desarrollo Urbano y los reglamentos municipales vigentes.
Más aún, se habla de haber pasado por alto las disposiciones jurídicas contempladas en el programa regional de desarrollo urbano, turístico y ecológico del corredor costero Tijuana-Rosarito-Ensenada.
Desde el terreno práctico, la instalación de la colosal planta dañó los ecosistemas y la biodiversidad al desmontar y nivelar los terrenos y luego construir diques, rompeolas y muelles, en agravio de la flora y fauna marinas. De hecho, se aduce que la planta Energía Costa Azul es la única en el planeta que carece de zona de exclusión térmica o zona de amortiguamiento, en violación de las normas internacionales.
La terminal de gas licuado le da servicio a las plantas privadas generadoras de energía eléctrica de California, quien resintió un grave problema de suministro del fluido a la quiebra de las empresas productoras locales. Se diría, pues, que Sempra Energy trasladó los riesgos que se tendrían en su país hacia el nuestro, como lo pretendía hacer en su momento la firma Chevron-Texaco en las islas Coronado de la propia Península de Baja California, o como lo hizo Shell con una planta similar en Altamira, Tamaulipas.
Por lo pronto, en afán de presionar al Gobierno para poner en su lugar al alcalde remiso, la firma se desgarra las vestiduras anunciando que la acción le obliga a cancelar otras millonarias inversiones en el país. El hecho es que la acción del alcalde Pelayo Torres prendió los focos rojos en la Secretaría de Gobernación, desde la cual salió la orden de movilizar al Ejército, según ello para evitar el riesgo de una explosión ante el peligro de un súbito paro de todas las máquinas de la regasificadora.
Los sellos del Ayuntamiento fueron destruidos.
Ahora que en las telas del caso se ubica la protesta de otra multinacional de Estados Unidos, Marathon Oil, quien habiendo pactado con el Gobierno de California la instalación de una planta similar a la de Sempra Energy, sufrió la expropiación de los terrenos en que la instalaría. La acción la firmó el ex gobernador Eugenio Elorduy Walther.
Aparentemente esta empresa es quien está promoviendo la investigación contra éste y su rival Sempra Energy. Por lo pronto, el caso pareciera colocar en la discusión una disyuntiva: ¿Inversiones extranjeras al costo que sea?
BALANCE GENERAL
Hace un año, exactamente en la primera semana de marzo, la empresa de telefonía Axtel presentó un recurso de inconformidad ante el órgano de control interno del ISSSTE, en la presunción de que el organismo le preparó un traje a la medida a la filial de Televisa Bestel/ Operbas en una licitación para una red nacional de comunicaciones internas.
La exposición de motivos hablaba de que las bases planteaban requisitos técnicos y operativos sólo cubribles por ella.
Sin embargo, la instancia se negó a suspender el proceso alegando que de hacerlo "la operatividad del Instituto se colapsaría al no contar con los elementos tecnológicos que se están solicitando, dado que los enlaces actuales no soportarían las aplicaciones requeridas para la operación de las unidades médicas". No hay, pues, opción de reversa.
Naturalmente, Bestel/Operbas ganó la licitación, pese a que su oferta le provocaría al organismo un sobrecosto de 600 millones de pesos, de haber mantenido la red que había diseñado Teléfonos de México. El caso es que un año después la ganadora de la licitación no termina de armar la red. Los comentarios se los dejo a su gusto.
REGRESA TG GROUP
Boicoteada su posibilidad por el ex secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan Molinar Horcasitas, pese a su oferta integral de rescatar no sólo a Mexicana de Aviación sino a sus filiales Click y Link, ahora resulta que la firma TG Group podría entrar finalmente al relevo ante los titubeos de PC Capital. De hecho, hartos de largas y más largas para el anhelado regreso a las pistas, en un escenario en que cada día transcurrido representa una pérdida de 100 millones de pesos, la simpatía de los trabajadores apunta otra vez a la firma cuya cabeza visible hasta hoy es Jorge Meza.
Hasta ayer PC Capital no había cubierto las condiciones planteadas por la tenedora K, dueña de las acciones de la compañía aérea, para su traspaso.
ORTIZ SUPERBANQUERO
¿Se acuerda usted cuando, en la antesala de las convenciones anuales de la Asociación de Bancos de México, los señores del dinero aguardaban con angustia el discurso del gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, que en día sí y otro también derivaba en una formidable regañada?
Bien, pues en la ola del tiempo ahora el ex funcionario está del otro lado de la mesa.
Ayer asumió la presidencia ejecutiva del mayor banco de capital mexicano, Banorte, con la exigencia de consolidar su tercer lugar en el sistema que alcanzó a su fusión con IXE.
La gran pregunta es cuándo le tocará el turno de presidir al organismo gremial.
TMM CRECE
Con una estrategia de negocios que sacudió totalmente su estructura, el grupo Transportación Marítima Mexicana que encabeza José Serrano Segovia sigue bateando de hit. Durante el año pasado su utilidad de operación creció 26%.
La firma mejoró radicalmente su perfil de deuda vía la emisión en tres tramos de Certificados Bursátiles a 20 años, con cuyos recursos se logró pagar deudas denominadas en dólares, además, naturalmente, de reducir los requerimientos de flujos en efectivo. El nuevo plan de negocios de la compañía está proyectado para cinco años.
