Pobladores de San Pedro Tepetitlán sorprendieron a un joven de 18 años de edad cuando robaba cables en esta comunidad, por lo que lo amarraron a un poste y golpearon, hasta que fue rescatado por policías estatales.
La Agencia de Seguridad Estatal (ASE) informó en un comunicado que los hechos ocurrieron alrededor de las 6:00 horas de este viernes, cuando durante un patrullaje de rutina los policías estatales se percataron que un sujeto era golpeado por una turba.
Guadalupe "N", de 18 años de edad, fue amarrado a un poste ubicado en calle Del Sol, en San Pedro Tepetitlán, municipio de Acolman, donde se reunieron unos 200 vecinos que amenazaban con linchar al presunto ladrón.
Los pobladores dijeron a la policía que "al sujeto lo mantenían retenido porque se encontraba robando cable de luz, por ello lo llevaron a ese lugar, donde lo amarraron al poste e intentarían lincharlo".
Un rollo de cable conductor de energía eléctrica, de 350 metros de longitud, fue colocado junto al poste donde estaba amarrado el joven, con lo que los vecinos pretendían demostrar que tenían pruebas de las fechorías del sujeto.
Los pobladores entregaron pacíficamente al joven retenido, que fue trasladado junto con el cable a instalaciones del Ministerio Público Federal con sede en Texcoco.
Seis habitantes de San Pedro Tepetitlán atestiguaron la entrega del presunto ladrón ante las autoridades, entre ellos quienes dijeron ser delegados municipales de dicha comunidad.
Versiones indican que el detenido era acompañado por otros tres hombres, que lograron huir, los cuales fueron sorprendidos por los pobladores alrededor de las 05:00 horas de hoy.
Habitantes de esta comunidad aseguraron que es la tercera ocasión que roban cables en la localidad.
Trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) repusieron el cable robado y restablecieron el suministro de energía eléctrica en la calle afectada.
En Almoloya de Juárez un presunto delincuente se entregó a policías estatales, el cual era seguido por 20 sujetos que lo acusaban de intentar robar un domicilio de San Lorenzo Cuauhtenco, junto con otros dos hombres, que lograron huir.
