Amnistía Internacional designó al activista mexicano Abel Barrera Hernández y al Centro de Derechos Humanos “Tlachinollan” que fundó como merecedores de su premio anual sobre derechos humanos, por el trabajo que ha realizado en defensa de los indígenas de Guerrero, así como por las investigaciones que ha realizado sobre desapariciones forzadas en las que se presume la participación del Ejército.
La presea que está acompañada de 10 mil euros, será entregada el 27 de mayo próximo en Berlín, Alemania, para reconocer el trabajo en defensa de los derechos humanos de este activista desde 1994.
Esta organización internacional argumentó que Barrera Hernández fue considerado para recibir este galardón, ya que junto con sus colaboradores “luchan incesantemente, exponiéndose a veces a un alto riesgo personal, por los derechos de la población indígena del estado de Guerrero”.
También se reconoce que Tlachinollan ha presentado “a menudo con éxito, ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos varios casos de violación y maltratos perpetrados por soldados”, por lo que su trabajo contribuye al fortalecimiento de los derechos humanos en todo México.
Entre las personalidades premiadas hasta ahora figuran: Svetlana Gannuschkina de Rusia (2003), Monira Rahman de Bangladesh (2006) y “Women of Zimbabwe Arise” de Zimbabue (2008).