Estados Unidos manifestó hoy su satisfacción por la decisión del gobierno de Turquía de imponer sanciones económicas contra el régimen de Siria en respuesta a su violenta campaña de represión contra la población civil.
Funcionarios de la administración del presidente Barack Obama consideraron que las sanciones, que se suman a las que impuso la Liga Arabe apenas la semana pasada, son un nuevo indicio del creciente aislamiento que Siria enfrenta en esa región.
'El liderazgo mostrado por Turquía en respuesta a la brutalidad y violación de los derechos fundamentales de los sirios, aislará al régimen de (el presidente Bashar al) Assad', indicó el vocero del Consejo Nacional de Seguridad, Tommy Vietor.
Sostuvo que la postura de Turquía envía un mensaje a Assad 'de que sus acciones son inaceptables y no serán toleradas'.
El vocero aseveró que estas nuevas medidas 'elevarán indudablemente la presión sobre el régimen de Siria'.
Adelantó que su gobierno continuará exhortando a otros países 'a sumarse al coro de condena contra el régimen de Assad, a fin de que las aspiraciones pacíficas y democráticas de los sirios se materialicen'.
Vietor señaló que el presidente Obama ha mantenido una cercana coordinación con el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, a lo largo de la crisis siria 'y seguirá haciéndolo'.