Foto: LA I
El Juez Cuarto de Primera Instancia del Ramo Penal giró la orden de arraigo por 20 días contra Julio César Hernández Morales, quien se presume fue el responsable de la muerte de dos mujeres en la colonia Torreón Jardín, en Torreón.
Otorgan documento
Luego de estudiar la solicitud de 40 días de arraigo que presentó el Ministerio Público sobre la presunta responsabilidad de Hernández Morales, de 23 años, ante el homicidio de Ana María Almochantaf Ochoa y su empleada doméstica Alejandrina Escobedo Lara, el juez penal, otorgó la orden de arraigo por 20 días, ya que la averiguación está muy avanzada, además que se cuenta ya con la confesión del presunto inculpado.
Ingresó por la tarde
Luego de cumplir con los tiempos de la detención, Julio César Hernández Morales fue trasladado de los módulos de detención al Hotel California, en donde permanecerá 20 días en una habitación.
La confesión
Según se informó en la Fiscalía General del Estado que luego de llevar a cabo las declaraciones de los dos empleados externos, que fueron detenidos en el lugar de los hechos, junto con Hernández Morales, se determinó que a quien pretendía acusar Hernández Morales, no pudo haber cometido el doble homicidio en menos de 5 minutos, que fue el tiempo que permaneció dentro del domicilio.
Sin embargo, al cuestionar a Hernández Morales cayó en contradicciones y posteriormente, dijo que había discutido con su patrona al llegar a trabajar, esto alrededor de las 8:10 horas de la mañana.
Además, el presunto responsable, señaló a los agentes investigadores que había matado a la dueña del domicilio porque le había cobrado de mala manera, mientras que con la empleada doméstica tuvo que hacerlo debido a que lo había descubierto dañando el centro de control del sistema de video vigilancia.
Aseguró también el empleado de confianza, que no se arrepiente de lo que hizo.
Investigan
Con el objetivo de completar con el trabajo de investigación e integración de la averiguación, el departamento de Periciales está trabajando en las pruebas que se realizarán de rodisonato para comprobar si Hernández Morales disparó contra el hombre que quería inculpar, además de sacar huellas en la escena del crimen, siendo éste un trabajo difícil debido a que hubo fuego en el sitio.
Además de que se realizaran pruebas de luminol a su ropa.