Por desaparecer. Quienes quedan de las Brigadas de Limpieza ya no tienenequipo.
Comenzaron eufóricos a principios de año y hoy esperan temerosos los fines de semana que salga su pago, trabajando prácticamente "con las uñas". Las brigadas de limpieza iniciadas hace menos de un año por el gobierno del Estado y el Municipio ven sus últimos días debido al fin del sexenio y a la falta de dinero para mantenerlas.
Los trabajadores que se enrolaron en esa actividad trabajan, sin bolsas para recoger los desechos de la vía pública, con escobas y trapeadores deformes por lo destruido que están.
Utilizan actualmente hasta ramas de palmas para el aseo de las calles. Esto se aprecia principalmente en los paseos públicos.
Muestran lo que quedan de sus trapeadores y sus escobas porque "no nos dan ya nada para trabajar, ni escobas y nomás esperamos el recorte", dicen algunos empleados entrevistados.
Cuando empezaron hace meses, tenían guantes y tapabocas. Ahora se cubren las manos con guantes de tejido que compran para protegerse de lesiones o el contacto directo con los desperdicios y cubren su boca y nariz con trapos.
De los 500 brigadistas contratados por el Estado quedan menos de 100.