El Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad exigió al presidente Felipe Calderón cumplir y honrar su palabra al concretar el diálogo en los términos en los que habían sido pactados desde el 23 de junio pasado, en respuesta a una carta enviada por la Secretaría de Gobernación la noche del miércoles en la que propone al movimiento un formato diferente donde se incluiría a otras organizaciones de la sociedad civil interesadas en el tema de víctimas.
Al respecto, el Gobierno Federal negó que existiera un compromiso con el movimiento que encabeza Javier Sicilia para establecer una mesa de diálogo exclusiva entre el presidente Felipe Calderón y este grupo de la sociedad civil, y ratificó su decisión de incluir a más integrantes de la sociedad civil en el análisis de la seguridad pública nacional.
El subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (Segob), Juan Marcos Gutiérrez, precisó, al fijar posición sobre los señalamientos del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, que nunca fue acordado un formato para el diálogo de seguimiento entre este grupo y el gobierno federal.
Ayer, en conferencia de prensa, Sicilia dejó en claro que de cualquier forma el Movimiento por la Paz acudirá el 7 de octubre al Castillo de Chapultepec a las 10:00 horas para llevar a cabo el diálogo, como se había planteado, y continuar el proceso democrático.
"Esperemos que no se comporte (el presidente Felipe Calderón) como toda la clase política, traicionando su palabra y a la nación", dijo Sicilia acompañado del exombudsman, Emilio Álvarez Icaza, así como de familiares de las víctimas que incluso participaron en el diálogo de hace tres meses en el Castillo de Chapultepec.
Acusaron al Gobierno Federal de querer debilitar u diluir el movimiento al cambiar el formato que el presidente Felipe Calderón había respaldado en el primer encuentro.
