Un proyecto de ley fue presentado hoy en una comisión legislativa del estado de Illinois cuyo propósito es aplicar una desgravación arancelaria con la finalidad de evitar que grandes empresas, como Sears, abandonen la entidad estadunidense.
La iniciativa busca conservar privilegios para corporaciones como Sears, Chicago Mercantile Exchange (CME) y Chicago Board Options Exchange (CBOE), las cuales han amenazado cambiar de estado sede debido a lo que consideran alta carga impositiva que deben pagar.
El proyecto de ley será analizado en el periodo extraordinario que ambas cámaras legislativas de Illinois deben iniciar mañana martes.
De esta manera, se contaría en esta misma semana con una ley express diseñada para beneficiar a las grandes compañías.
La propuesta de desgravación fiscal consiste en enmiendas a una ley que permite a los corporativos ahorrar 120 millones de dólares al año en impuestos estatales, al tasar sólo una cuarta parte de sus ingresos para la recaudación estatal.
Las tres empresas han presionado desde hace varios meses e incluso aseguran que otros estados les han hecho atractivas ofertas para cambiar sus oficinas centrales de Illinois, por lo que están dispuestas a moverse pronto si no se atiende su inconformidad.
En esta exigencia, los corporativos cuentan con el apoyo del alcalde Rahm Emanuel, del gobernador Pat Quinn y de los líderes de ambas cámaras legislativas. Estos últimos han declarado que simpatizan con los reclamos de CME, CBOE y Sears, pero que también desean ayudar a otras empresas pequeñas.
La iniciativa significaría finalmente una reducción de impuestos para los corporativos a cuenta de los costos del Estado. Dichas exenciones entrarían en funcionamiento a partir del primero de julio de 2012, cuando inicia el siguiente año fiscal.
