El portero Luis Michel y el mediocampista Jonathan dos Santos durante su estadía en Las Vegas. (El Universal)
LAS VEGAS, Nevada.- Se habla del molesto pasto sintético, de lo angosto del campo, además de cuestiones extrafutbolísticas, como las posibles causas del pobre desempeño de México Sub-22 en su primer partido de preparación contra Venezuela. La realidad es que los jugadores reconocen que están lejos de alcanzar un buen nivel competitivo, mas eso no impide soñar con una buena participación en la Copa América.
Por el contrario, Rafael Márquez Lugo, uno de los jugadores de experiencia dentro del grupo, advierte que "el equipo va a ser competitivo en el certamen, desde luego que sí".
Reconoce el delantero que "por momentos, el plantel juega bien, genera ocasiones, pero no tuvimos certeza", dice, al tiempo que descalifica la crisis que se vive dentro de la Selección Mayor, por el tema del dopaje y los rumores que de todo eso se desprenden. "No nos han dicho de que vaya a haber cambios y no creo que sea un pretexto válido para la situación que vivimos" contra los venezolanos, expone.
"El resultado es malo, hay que ver el fondo de las cosas. Por momentos, el equipo se comportó bien, tuvo posesión, se generaron ocasiones de gol que no aprovechamos. Inclusive pudimos haber empatado e irnos arriba, pero la cancha es angosta y no se puede practicar buen futbol. Viendo el trasfondo, el equipo mostró buenas cosas", aboga Márquez.
En esa valoración, el portero Luis Ernesto Michel prefiere analizar lo que pasó la noche del sábado "con la cabeza fría", porque "cuando pierdes es obvio que algo se hizo mal".
Luis Fernando Tena, técnico a cargo de la Selección, asegura que con determinados elementos tendrán que trabajar a "marchas forzadas" para corregir situaciones.