EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

Calderón en Washington

JULIO FAESLER

Si en Estados Unidos se renueva la inquietud por lo que sucede en México con el asesinato de uno de sus agentes, en México existe una completa condena hacia Estados Unidos por la conducta de ese país en cuando menos tres temas importantes que tienen que ver con las muertes que el narcotráfico sigue cobrando.

El primer asunto es el descontrol en el consumo de drogas de los norteamericanos. No se conozcan cárteles y capos en ese país más que los que sus autoridades prefieren endosarle a México. Tampoco se evidencian las inevitables corrupciones que hay en los cuerpos de seguridad, aduanas y migración que son aliados invaluables para las mafias internacionales.

El segundo reclamo que Felipe Calderón tiene que repetirle al presidente Obama, es el descomunal tráfico y uso de armas legalizado al amparo de una antigua enmienda constitucional que clama ser corregida. Con el mismo derecho que Estados Unidos frecuentemente censura regímenes y prácticas jurídicas mexicanas, el presidente mexicano tiene la misma autoridad para señalar la falta en Estados Unidos de una campaña eficaz para acabar con el libre comercio de armas incluso las más letales. El sentido común más elemental tiene que vencer el millonario cabildeo de la Asociación Nacional del Rifle que, respaldado por el partido republicano, tiene de rehén la seguridad nacional norteamericana y que arrastra también a la nuestra.

La tercera reclamación que el presidente Calderón lleva en su carpeta se refiere a la lentitud de entrega de fondos y equipos para la ágil ejecución del Plan Mérida.

Los agravios, pues, son nuestros. Hay más que suficientes elementos para entender que la próxima visita de Calderón no será, como lo vienen diciendo muchos de nuestros comentaristas que se complacen siempre no sólo en criticar todo lo que la administración actual emprende, sino aún grave, se complacen en la constante costumbre en situar a México en una posición sumisa ante Estados Unidos. La autoridad con que Calderón debe de hablar con su homólogo, está respaldada en los miles de nuestros muertos producto de la insaciable demanda norteamericana de drogas.

Frente a su incapacidad de poner su propia casa en orden, a Obama le resulta más fácil instruir a sus secretarias de Estado y del Interior, declarar que la violencia en México alcanza niveles alarmantes de ingobernabilidad y hasta de vinculaciones con el terrorismo internacional. En realidad, lo que más les preocupa es que el mortífero escenario traspase las fronteras y se esparza a lo largo y a lo ancho de su país.

Ante esta última realidad, se antoja que la única esperanza que tenemos en México es que en un futuro tan cercano como posible, la producción norteamericana de drogas aumente hasta la autosuficiencia y deje de endosarnos la faceta más cruel y tenebrosa de sus incorregibles vicios.

Pero además de estos candentes temas, es el momento para que los dos presidentes evalúen los efectos de la recomposición de fuerzas que se opera en Medio Oriente con el desmoronamiento de las siniestras dictaduras musulmanas de esa región. Se abren incertidumbres en el abasto petrolero que de una manera u otra, afectan nuestras propias perspectivas.

El reacomodo de equilibrios geopolíticos plantea para todos escenarios impensados e imprevisibles donde las energías fundamentalistas pueden aprovechar la confusión y descarrilar lo que se saluda como un proceso hacia la democratización y el avance socioeconómico.

Los intereses de México son bien distintos a los de Estados Unidos cuya hegemonía ve seriamente amenazada. Nuestros planes de desarrollo tienen que ver con la consolidación de programas nacionales específicos económicos y educativos que están siendo gravemente interferidos por la lucha contra el narcotráfico a la que Estados Unidos nos ha orillado. Esta es la deuda que Calderón le tiene que cobrar a Obama.

juliofelipefaesler@yahoo.com

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 603369

elsiglo.mx