Desfile. Raúl Castro preside en Plaza de la Revolución Antonio Maceo, en Santiago de Cuba, el desfile del Día del Trabajo. EFE
Cientos de miles de cubanos marcharon ayer a lo largo y ancho de Cuba para conmemorar el Día Internacional de los Trabajadores.
De manera inusual, el desfile de este año fue encabezado por el presidente Raúl Castro desde la provincia de Santiago, a unos mil kilómetros al este de la capital, donde tradicionalmente pasaba este día el jefe del Gobierno.
Vestido con guayabera y un sombrero de pajilla, el mandatario saludó a sus compatriotas del oriente del país, quienes agitaban banderas rojas y cubanas.
Marchamos "para ratificar que el socialismo es nuestra opción", dijo en un breve comunicado de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) su líder, Salvador Valdés, al tiempo que participaba del desfile en la capital.
Medios de prensa cubanos mostraron marchas en casi todas las ciudades del país.
"Es la primera marcha que se realiza después del congreso, es un respaldo a los acuerdos del congreso. Viva la clase obrera, viva la revolución" , expresó un locutor que acompañó la marcha por altoparlantes e iba saludando a los diferentes sectores que avanzaban.
Hace dos semanas se llevó a cabo el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, un evento tras el cual se espera un paquete de medidas que "actualice" el modelo, como expresó Castro, para rescatar la economía de la isla, fuertemente golpeada por la crisis mundial e ineficiencias internas.
