Cambian ritos funerarios

Las costumbres en torno a la muerte han cambiado, tanto por el desarrollo mismo de los ritos como por la modernidad y la situación de inseguridad.

En este sentido, la última despedida de las personas que fallecen ha dejado de ser un momento oscuro para, según la religión del fallecido, honrar su memoria entre familiares y amigos.

"Los ritos han dejado de ser esa situación fúnebre, triste, para comenzar la evolución, las funerarias y los productos de las funerarias ya dejaron de ser con colores oscuros y sin luz, ahora los ataúdes vienen en tonos pasteles, vistosos, elegantes, con herrajes muy llamativos", manifestó Sergio Oviedo García, administrador de las Funerarias del DIF.

También ha cambiado el horario de velación, pues las familias prefieren velar durante todo el día, cerrar en la noche y volver a velar al día siguiente, cuando anteriormente esto era una jornada de 24 horas continuas.

"El cliente decide, generalmente no presentan problemas por la apertura, pero sí por la hora de cierre", comentó.

En los ejidos persiste la velación en los domicilios, mientras que en las ciudades, son muy pocas las zonas donde las familias quieren tener al difunto en casa y prefieren acudir a los lugares especializados para ello.

"Hay colonias complicadas a donde nosotros no podemos entrar porque se corren muchos riesgos, entonces tenemos que jugar con los horarios, si para las 7 u 8 no se puede recoger el cuerpo, entonces es hasta el día siguiente", expuso, "podríamos recoger el cuerpo a cualquier hora, pero antes se entregaba en cuanto se terminaba de embalsamar y ya no es así, ahora esperamos hasta que amanezca para llevar el servicio".

 CREMACIONES

En Torreón, particularmente, ha subido considerablemente la demanda de cremaciones contra las inhumaciones.

Anteriormente se manejaba un porcentaje mínimo de cremaciones, pero en la actualidad se estima que el 20 por ciento de las familias promedio lo demanda, mientras que el 80 por ciento prefiere la inhumación.

"En Torreón todavía hay espacio en los panteones, la cremación, yo considero, es el servicio del futuro en cuanto a los restos por la cuestión de los espacios, la saturación, lo costoso y la contaminación que implica tener espacios sin un control ecológico", indicó.

El obispo de Torreón, José Guadalupe Galván Galindo, señaló que la Iglesia Católica pide que el cuerpo sea sepultado, pero no se opone a la cremación, pues se realiza con el mismo respeto y veneración.

"Es acelerar el proceso de descomposición", comentó. Y como la ciudadanía demanda sitios seguros para guardar las cenizas, en Torreón ha aumentado este servicio en las iglesias, mientras que anteriormente sólo San José tenía este espacio, denominado columbario, poco a poco se han sumado el Centro Saulo, la parroquia de San Pedro Apóstol, la de la Medalla Milagrosa, de la Encarnación, del Inmaculado Corazón de María, la parroquia de Fátima, la de San Judas, entre otras.

Este servicio es más frecuente en el estrato social alto que en el bajo, donde aún se tiene la creencia de que se tiene que enterrar el cuerpo.

En el servicio del programa para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Municipal, se manejaban 9 cremaciones al mes y la cifra ha subido a 15.

"Desafortunadamente, también se crema mucho a las personas que mueren por causas violentas, al no poder velar el cuerpo, es muy difícil trabajar con sus restos", dijo Oviedo.

 LOS SERVICIOS

Los servicios funerarios varían de acuerdo a la religión, que es lo que determina cómo se realiza.

"En cierto sentido, es un evento social, aquí viene gente a rendirle un respeto a la persona que falleció", explicó, "según la creencia de la familia se celebran los oficios".

En las funerarias se presentan lo mismo un sacerdote católico que un pastor o cualquier otro ministro o representante de fe del fallecido o de la familia.

"Es muy similar, el padre, el pastor, los hermanos, hablan de Dios, de la fe, hay oraciones y muchas veces traen música, así se lleva el duelo en estas salas", indicó.

En las salas de velación del DIF se han tenido servicios hasta de cuatro días porque viene gente de Estados Unidos u otros lugares a despedirse de los difuntos, pero también ha habido ritos exprés de una hora, donde los familiares vienen de un proceso largo, de una enfermedad terminal, o la persona es de edad muy avanzada.

Dentro del ataúd, los familiares colocan muchas fotografías, objetos personales, playeras, botellas de vino, para que el difunto vaya acompañado de sus cosas.

Salvador Castro, director de Panteones en Torreón, dijo que aún con la inseguridad, la afluencia de ciudadanos a los cementerios no ha decaído, sino que se mantiene la tradición de visitar las tumbas.

"Se mantiene, sin duda, es muy fuerte esta tradición, llegan las nuevas generaciones y siguen viniendo al panteón", expresó.

 DÍA DE MUERTOS

La liturgia católica dedica el día primero de noviembre a la Fiesta de Todos los Santos y existen muchas tradiciones de acuerdo a las costumbres de cada región.

"La Iglesia Católica ha sabido unirse a estas costumbres y darle el enfoque cristiano, el día de la muerte, el cuerpo espera la resurrección, el alma sube al cielo y las oraciones que se ofrecen es precisamente por ella, pero el cuerpo recibe la veneración y el respeto de sus seres queridos, en torno al cuerpo, tenemos el dolor por la separación", comentó el obispo.

 FUENTE: INVESTIGACIÓN DE  EL SIGLO DE TORREÓN