EFE
El hielo rodea las tumbas de un cementerio inundado, en Kiskunfelegyhaza, al sureste de Budapest (Hungría). Debido a las inundaciones y a las bajas temperaturas, el suelo en muchas partes de la región sureña de la Gran Llanura Húngara se encuentra completamente congelado, por lo que los ataúdes no pueden ser enterrados en los cementerios desde hace días.