Solidaridad en momentos de emergencia. Momentos en que los rescatistas evacuan a personas que quedaron atrapadas en el sismo y el tsunami que devastó Japón el pasado viernes.
La Oficina de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas (OCHA), señaló ayer que cerca de 600 mil han sido evacuadas en los últimos tres días en Japón, tras el terremoto, el tsunami que le siguió y por la actual crisis nuclear.
Según los últimos datos, 380 mil personas fueron evacuadas de las zonas afectadas por ambas catástrofes naturales, mientras que 210 mil han sido evacuadas del área de 20 kilómetros alrededor de la central nuclear de Fukushima, donde se registró una explosión tras el terremoto.
De un primer reactor nuclear con problemas, la preocupación se ha extendido a un segundo en el que el sistema de enfriamiento de emergencia ha dejado de funcionar.
Además, las autoridades niponas han declarado la alerta nuclear en la planta nuclear de Onagawa, unos 150 kilómetros al norte de Fukushima.
Las autoridades declararon estado de emergencia en cinco reactores el viernes después de que los operadores perdieron la capacidad de enfriarlos con métodos convencionales.
Uno más se añadió a la lista, para un total de seis: tres en el complejo de Daiichi y tres en otro. Japón tiene 55 reactores en 17 instalaciones.
En cada uno de esos lugares se han ordenado evacuaciones. La Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) informó que el domingo se declaró también un estado de emergencia en otro complejo, después de que niveles de radiación superiores a los permitidos se detectaron ahí.
La OIEA informó que, según las autoridades japonesas, los tres reactores están bajo control.
Una bomba del sistema de enfriamiento en otro complejo nuclear, la planta de Tokai Dai-Ni, falló también a raíz del sismo del viernes. Sin embargo, una segunda bomba operaba normalmente, lo mismo que el reactor, según Japan Atomic Power Co., la empresa que opera la instalación. La compañía no explicó por qué no reportó lo ocurrido sino hasta el domingo.
El terremoto del viernes, uno de los más poderosos del que se tenga registro, provocó un devastador tsunami que recrudeció las secuelas. La Policía de la prefectura (provincia) de Miyagi dijo ayer que podría haber más de 10,000 muertos en esa región.
Hasta ahora, las autoridades han mencionado alrededor de 1,600 muertos en total.
La Agencia Meteorológica de Japón ubicó el domingo la magnitud del sismo en 9.0, con lo que supera la fuerza de 8.9 mencionada inicialmente por el Servicio Geológico de Estados Unidos.
El organismo de la ONU señaló también que varias áreas de la costa afectada por el tsunami "permanecen inaccesibles".
Por el momento, 3 mil víctimas han sido rescatadas, pero se teme particularmente por la mitad de los 10 mil residentes del poblado de Minami-Sanriku-cho (prefectura de Miyagi, en el norte de Japón) que fue arrasado por el tsunami.
La OCHA sostuvo que los esfuerzos de las autoridades japonesas ante la emergencia se intensifican con el apoyo de los equipos de especialistas que siguen llegando desde distintos países, en tanto que sus científicos trabajan a contrarreloj para enfriar los reactores de la planta nuclear de Fukushima.
Al mismo tiempo, el Gobierno ha movilizado a 100 mil miembros de sus tropas de defensa, así como 190 aviones y 45 botes, para colaborar con las operaciones de ayuda, que resultan muy difíciles debido a las continuas réplicas (del terremoto), las alertas de tsunami, así como los incendios.
Según el informe de la OCHA, el Gobierno japonés ha confirmado que 2.6 millones de viviendas carecen de electricidad y 1.4 millones no tienen agua, mientras que se está agotando el gas en 3.2 millones de hogares, una situación que resulta particularmente crítica por las bajas temperaturas en el país (alrededor de 1 grado centígrado la pasada noche).
Por su parte, la gran mayoría de hospitales han llegado al borde de su capacidad de atención a los heridos.
PÉRDIDAS MILLONARIAS
El terremoto en Japón, el mayor de su historia, causará probablemente pérdidas superiores a 100 mil millones de dólares para la economía de ese país y los seguros tendrán que hacer frente a hasta 34 mil 600 millones por los daños causados en propiedades aseguradas, según dos firmas de EU.
AIR Worldwide y Eqecat, dos compañías que elaboran esquemas para calcular los riesgos ante catástrofes para aseguradoras, reaseguradoras, corredores de Bolsa, los mercados financieros y compañías, emitieron sus primeros informes preliminares sobre el posible daño económico del terremoto de 9 grados en la escala abierta de Richter que azotó el viernes el norte y el este de Japón.
Eqecat afirma en su informe que las pérdidas económicas derivadas del terremoto siguen aumentando conforme evoluciona la situación y se producen daños adicionales por efectos relacionados al sismo, como incendios o incidentes en plantas nucleares.
TERREMOTO MOVIÓ A JAPÓN
El terremoto en Japón, el mayor de su historia, parece haber desplazado la isla en unos 2.4 metros, según muestran imágenes de satélite tomadas por la NASA antes y después de la tragedia, y los cálculos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
"En este momento, sabemos que una estación de GPS se desplazó (2.4 metros) y hemos visto un mapa de la GSI (Autoridad en Información Geoespacial) en Japón que muestra el patrón de cambio en una gran superficie y concuerda con el cambio de la masa terrestre", señaló a CNN el geofísico del USGS Kenneth Hudnut.
El terremoto, de 9 grados en la escala abierta de Richter, azotó el viernes el norte y este de Japón, y también puede haber desplazado casi 10 centímetros el eje de rotación de la Tierra, según dijo el mismo día del sismo un estudio preliminar del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia (INGV).
La agencia espacial estadounidense (NASA) publicó dos imágenes que ilustran el desplazamiento de Japón.
Las fotografías fueron tomadas por Espectroradiómetro de Imágenes (MODIS, por su sigla en inglés) de su satélite Terra.
Rescatan a hombre que flotaba en el tejado
Hiromitsu Shinkawa fue arrastrado al mar mientras colgaba del techo de su casa, después de que el tsunami se llevó a su esposa. Por dos días, flotó a la deriva en aguas de la costa noreste de Japón, tratando en vano de llamar la atención de helicópteros y barcos que pasaban cerca. Pero el domingo, un buque militar japonés vio al sexagenario cuando ondeaba una prenda de color rojo. Estaba a unos 15 kilómetros de la costa de la ciudad de Minamisoma, dijo Yoshiyuki Kotake, un portavoz del Ministerio de Defensa.
Shinkawa dijo a socorristas que el tsunami sobrevino cuando él y su esposa regresaban a casa para recoger algunas pertenencias después del sismo del viernes. Su esposa fue arrastrada por el agua, dijo Kotake.
"Varios helicópteros y barcos pasaron, pero nadie me vio", dijo, de acuerdo con otro portavoz del ministerio que se negó a ser identificado. Los soldados japoneses usaron un bote para ponerlo a salvo.
Oficiales militares dijeron que Shinkawa tuvo suerte de que el clima benigno y el mar relativamente calmado le permitieran mantenerse a flote por casi dos días, reportó la agencia de noticias Kyodo.
"Creí que era el último día de mi vida", dijo, de acuerdo con los reportes.