El cardenal Norberto Rivera Carrera resaltó que se une al dolor de los deudos y exhortó a los fieles católicos a elevar a Dios sus oraciones por el eterno descanso de estas dos periodistas.
El cardenal Norberto Rivera Carrera sostuvo que el "terrible asesinato" de las periodistas Rocío González Trápaga y Marcela Yarce Viveros, "denota una total cobardía, indolencia y perversidad, por lo que nos unimos a la exigencia de la sociedad y del medio periodístico para que las autoridades cumplan con su fin principal que es el de garantizar la seguridad de sus gobernados tanto en sus personas como en sus bienes, y castiguen con todo el rigor de la ley a los responsables de estos y otros crímenes".
A través de un comunicado emitido por la Arquidiócesis Primada de México, se expresa "la condena enérgica" de esta Arquidiócesis y del cardenal al "cobarde y despiadado asesinato" de esas mujeres de bien, cuyos cuerpos fueron encontrados ayer en un parque de la delegación Iztapalapa.
"Nuestra patria tiene derecho a vivir en paz, y es obligación de las autoridades hacer efectivo este derecho y justo anhelo, que es el principio de toda civilidad y una condición indispensable para el auténtico progreso y desarrollo de todo pueblo".
El cardenal Norberto Rivera Carrera resaltó que se une al dolor de los deudos y exhortó a los fieles católicos a elevar a Dios sus oraciones por el eterno descanso de estas dos periodistas.
Advirtió a los delincuentes que el día de su muerte tendrán que enfrentar el juicio divino en el que Dios dará a cada quien según sus obras.