Checo ya no puede esperar más para volver a competir.
El no sumar puntos tras dos carreras lo conducen a ya querer volverse a subir al auto C30 de Sauber. Sergio Pérez quiere pisar el acelerador cuanto antes y demostrar su valía en la Fórmula Uno. Su próxima oportunidad será en el circuito de Shanghái.
La pista del Gran Premio de China, a celebrase el próximo 17 de abril, es un trazado conocido por el mexicano. Ya tuvo la oportunidad de correrla durante dos seriales distintos.
“La pista de Shanghái será un gran reto para mí, yo diría que tanto o más que Sepang. Conozco la pista por dos carreras que tuve ahí, una con la A1GP en el 2007 y otra con la GP2 Asia en 2009. Me gusta en especial la recta en la que se frena de forma brusca para entrar a las curvas más lentas”, remembra Pérez.
La pista está compuesta por 16 curvas, con dicha recta peculiar en donde se pude alcanzar la velocidad de hasta 317 kilómetros por hora. Se han celebrado siete Grandes Premios, con el mismo número de vencedores.
Como muchos otros circuitos de F1, fue construido por el Hermann Tilke. Uno de los detalles de este trazado son sus primeras tres curvas que forman la figura del yin y yang.
La primera calificación de la carrera china está pactada para las 21 hrs. del jueves, tiempo del centro del país, donde Checo Pérez espera tener mejores marcas que en las fechas anteriores.
“Espero que me vaya mejor que en la calificación de Malasia, pero mi meta es aprender y adquirir más experiencia. He disfrutado mucho las veces que he estado en Shanghái y estoy entusiasmado de tener mi tercera visita a este circuito”, apunta el piloto de Sauber.
James Key, director técnico de la escudería suiza, adelantó que no se realizarán cambios significativos en las monoplazas debido al poco tiempo que se tiene entre las carreras asiáticas.
“Es genial regresar a Shanghái, fue mi primera pista con el equipo en 2010. Debido a las características del trazado, puede ser muy bueno para nuestros autos. El circuito tiene retos interesantes, una gran recta, curvas lentas y otras serpenteantes, donde es importante la tracción y estabilidad”, analiza Key.
Las llantas volverán a ser un factor determinante y el director técnico de Sauber confía en que volverán a sacarle provecho a las gomas.
Checo ya no puede esperar más para volver a competir. “Me siento ansioso por estar de nuevo en mi auto F1 en la pista de Shanghái”, puntualizó
