Con oraciones y penitencias inició el Miércoles de Ceniza. (El Siglo de Torreón)
Cientos de católicos acuden a las iglesias a recibir la imposición de la ceniza. Este día inicia la Cuaresma que prepara durante 40 días a los cristianos para la Pascua: pasión, muerte y resurrección de Jesús.
Con oraciones y penitencias inició el Miércoles de Ceniza. A las 07: 30 horas, monseñor José Guadalupe Galván Galindo, Obispo de Torreón, presidió en la Catedral del Carmen la Eucaristía en donde realizó el rito de bendecir la ceniza que él mismo recibió como signo de su conversión.
Con la Eucaristía presidida por el Obispo inició en Torreón formalmente el tiempo de Cuaresma que la Iglesia ofrece como camino de renovación que concluirá en la Pascua.
El obispo dijo que es un tiempo fuerte de renovación de la vida personal, de la relación con los otros y con Dios, todo a partir de la práctica de los ejercicios cuaresmales: ayuno, obras de misericordia y oración.
En la Eucaristía participó también el Seminario Diocesano y los presbíteros que colaboran en la Catedral del Carmen.
Desde el siglo III, la Iglesia toma los 40 días de la Cuaresma para reflexión a semejanza de los 40 días del diluvio, los 40 años que Moisés peregrinó en el desierto y los 40 días que Jesús pasó en oración, ayuno y abstinencia también en el desierto.
La ceniza que impondrán los sacerdotes a miles de católicos a lo largo de este miércoles será el polvo que quedó de la quema de imágenes religiosas y de los ramos de la Semana Santa del año pasado.
La Pascua es una fecha movible porque corresponde al primer domingo después de la primera luna llena de primavera, es decir, se rige por un calendario solar.
La Cuaresma, explica el obispo, llama a la conversión, al arrepentimiento y a la humildad, que dan sentido al espíritu de la Pascua.
La imposición de la ceniza es un ritual en donde los cristianos se arrepienten de sus pecados y lo inician en penitencia con el ayuno.
