El cierre de antros y salas de masaje en la región ha disminuido hasta en 40 por ciento el número de sexoservidoras y ahora se les ofrecen otras opciones de empleo, de acuerdo a lo informado por la directora de Prevención Social de Gómez Palacio, Georgina Valdez González.
"Llegamos a tener hasta 420 sexoservidoras en el padrón, pero ha descendido de manera muy marcada, ya que han cerrado varios lugares donde laboraban, como bares y cantinas por la avenida Allende y otras calles, además de las salas de masaje, sobre todo por el clima de inseguridad", explica la directora.
En la actualidad, dice, sólo la mitad de las mujeres registradas en el padrón están activas, pues además de los cierres de las cantinas, algunas se van a trabajar a la frontera.
"A todas las que están activas se les practica el exudado vaginal cada semana, además del VDRL y el VIH-SIDA cada tres meses, con la finalidad de protegerlas a ellas y evitar enfermedades de transmisión sexual", menciona.