CLAMOR
El próximo viernes es el 38 aniversario de la Casa de la Cultura de Gómez Palacio, cuya historia es ejemplo de la unión y tesón de la comunidad lagunera. La constitución de esa Casa de la Cultura obedeció a varios factores: siendo campeón nacional de oratoria Salomón Atiyhe...
... por iniciativa propia solicitó al presidente Luis Echeverría un centro cultural en Torreón, el cual giró las instrucciones para que Bellas Artes designara recursos para tal fin, el Gobierno de Coahuila debía aportar una parte y Magda Briones gestionó los apoyos pero éstos fueron negados; ante esto el Arq. Luis Ortiz Macedo, director de Bellas Artes, propuso que se hiciera en Gómez Palacio para que los recursos no salieran de la Laguna. Ernestina Gamboa llamó al gobernador de Durango, quien inmediatamente dio la autorización para una aportación mensual.
Se firmó un convenio, se iniciaron operaciones en la guardería Ford al pie del Cerro de la Pila y se nombró director al Dr. Francisco Galindo Chávez, quien además fue primer deportista olímpico de la Laguna, director del Instituto 18 de Marzo y presidente municipal.
Hubo otro elemento: un año antes en 1972 se había constituido el patronato para la construcción del Museo de Arte Moderno en Gómez Palacio pues generosamente la gomezpalatina Silvia Rodríguez Valles donó su colección de obras del maestro Alberto Gironella a condición de que se construyera un recinto digno que las resguardara, y ya habían logrado la donación del terreno. Así se construyó primero el museo e inmediatamente después el edificio de aulas y talleres y el teatro Dolores del Río.
Se convirtió en un espacio que igual albergaba a la comunidad artística de la región que a los ciudadanos que buscaban una alternativa para aprender, crecer y divertirse.
Hoy cuesta mucho esfuerzo lograr la consecución de proyectos similares, la unión de la comunidad y la respuesta de las autoridades, sobre todo de Durango, son difíciles; sin embargo hay quienes le seguimos apostando a que sí se puede y actualmente hay proyectos sobre la mesa con los que podríamos revivir ese empuje y honrar ese legado de unión de nuestros antecesores.
