Trato. La codependencia requiere atención médica y psicológica; en esta última la familia completa necesita involucrarse, pues aunque el resto de los miembros no fueran codependientes, les afecta. ARMANDO ACEVEDO / EL SIGLO DE DURANGO
Aunque todavía es conocida por pocas mujeres y el 94 por ciento de ellas la padece, la codependencia ya tiene un centro de rehabilitación en Durango, en el grupo Luz de Vida de Codependientes Anónimos, A.C.
Instituciones como Misión Korián, el Instituto de la Mujer y el de la Juventud han comenzado a canalizar mujeres al grupo, por lo que fue necesario ampliar el servicio para crear el centro Sanat Kumara, relató una de las líderes de Luz de Vida.
Ahora la codependencia ya no se tratará solo desde la solidaridad de un grupo; cuenta con la atención de psicólogo, enfermera, médico general y nutriólogo.
Las féminas requieren atención a su salud en todos los planos dado que la dependencia afecta todo, desde la salud mental, que es el principal daño, hasta la física.
A ello se suma el problema de sobrepeso en la mujer del que Durango encabeza listas nacionales.
Las mujeres son codependientes a una pareja, al dinero, al trabajo, a la comida, a las compras y a la violencia.
Es una de las patologías por las que las mujeres no pueden romper los círculos de violencia física, verbal, emocional y sexual.
La codependencia se desarrolla desde los 13 años y no es curable, solo se trata.
TERAPIA FAMILIAR
Los servicios del centro de rehabilitación Sanat Kumara, que cuenta con permisos sanitarios, ofrece la terapia de las constelaciones familiares a toda la comunidad y no solo a las integrantes de la asociación civil.
De hoy al domingo el centro desarrollará actividades de cuarto y quinto pasos del programa de 12 pasos, el cual está abierto al público en general, comentó.
Más información al teléfono 132-71-45, en el grupo Luz de Vida.
