Siglo Nuevo

Cómo seducen tus gestos

SEXUALIDAD

Cómo seducen tus gestos

Cómo seducen tus gestos

Psicólogo Sexólogo Silvestre Faya

La comunicación es parte fundamental para que la vida erótica de una pareja marche bien. Pero lograr una comunicación realmente efectiva requiere de algo más que palabras: cada gesto cuenta en el juego de la seducción.

Los gestos dicen más de lo que imaginamos. El vocablo gesto se define como el movimiento del rostro, de las manos o de otras partes del cuerpo con que se expresan diversos afectos del ánimo. Hombres y mujeres por igual están dotados de la capacidad de comunicarse sin hablar a través de señales corporales, entre las cuales las miradas tienen la mayor influencia.

Y es que los ojos manifiestan sorpresa, alegría y más. Pero también hacen evidente el instante en que se despierta el apetito sexual. Cuando dos amantes entrecruzan la vista -aun rodeados de otras personas- pueden trasmitirse el mutuo deseo de pertenencia que los envuelve. Las pupilas se contraen o se expanden en función al placer que anticipan; es como si iniciaran una danza erótica. Hay asimismo quien se queda embobado contemplando la cara, las piernas o cualquier otra zona del cuerpo de su pareja.

El rostro es la ‘portada social’ con la que nos presentamos a los demás. Unos labios húmedos, entreabiertos o mordiéndose ligeramente, pueden enviar al compañero sentimental la señal para que a su vez él conteste con un significativo guiño de complicidad.

¡Cuántos novios o esposos se han conocido en un sitio al cual ninguno quería ir! Pero les bastó un intercambio de miradas para presentir los tórridos encuentros que más adelante compartirían. Es más, existen cónyuges que en principio se cayeron mal, y sin embargo luego de unas horas de callada observación descubrieron que mutuamente se decían: “Quiero todo contigo” y desde ese momento la atracción ocupó el primer plano.

EL ARTE DE SEDUCIR

De acuerdo al maestro Javier Lazalde Alcalá, la palabra ‘seducir’ significa ‘llevar aparte’. Y ¿para qué se busca un lugar aparte? Para disfrutarse mutuamente, para amarse y prodigarse un placer único, el goce orgásmico e insaciable que sólo se da entre los amantes.

Desde la juventud, hombres y mujeres se preguntan cómo hacer para atraer al ‘objeto de deseo’ por quien tienen esas palpitaciones que solamente se apagarán con el abrazo íntimo, cálido, lúbrico.

Quien espera influir en otro -la pareja o alguien a quien se pretende conquistar- debe usar el brillo y la fijeza de sus ojos para revelar así la profundidad de su pensamiento sensual. Tal vez la ‘indirecta’ no sea debidamente correspondida, pero la intención debe quedar clara: “¡Te quiero conmigo!” El gesto no debe dejar lugar a dudas aun cuando sea meramente una insinuación.

UTILICE SUS CEJAS

Si usted acostumbra depilarse o maquillarse las cejas tenga cuidado, eso puede restarle recursos a la hora de enviar mensajes eróticos, pues éstas son grandes aliadas cuando se busca seducir con un gesto.

Las cejas pobladas del varón, a veces unidas, muestran un porte viril que debe y necesita emplearse para comunicar a la mujer que de ahora en adelante ella y sólo ella será dueña de ese rostro y del resto del cuerpo.

Las féminas sabrán arquear sus cejas para proyectar miradas sugerentes o demandantes, según lo que anhelan, ya sea un encuentro tierno o una noche fogosa.

LABIOS Y BESOS, TODO VA JUNTO

Unos labios, húmedos, abundantes, rozagantes, cachondos, son el preludio del erotismo. Quien sin hablar muestra su boca dispuesta al amor, a los besos, a las caricias más profundas, tendrá por parte de su amante una devoción entera.

La fémina exige con los movimientos de su boca la ternura y la pasión unidas y dispuestas. Unos labios apretados pueden indicar rechazo o enviar la indicación de: “Te faltan más detalles, no te vayas tan rápido, atiende a tu mujer”. Entonces el hombre debe aprender a interpretar las señales que su compañera le haga, a fin de dar contestación inmediata a lo que ella requiera.

EL PODER DE LAS MANOS

Tomar a su pareja de la mano, rozar discretamente su piel o hacer con su índice un ademán que claramente dice: “Ven aquí”, son algunos de los ejemplos más sencillos de cómo las manos pueden ser hábiles transmisoras de mensajes románticos.

Asimismo, cada par de amantes puede inventar su código secreto de gestos que inviten a la fogosidad, pequeñas claves imperceptibles para los demás pero que puestos de acuerdo entre sí harán evidente el deseo de alejarse del grupo de amigos para retirarse a la intimidad de la recámara. No tiene qué ser algo complicado: juguetear con el lóbulo de la oreja, pasar el meñique por encima de la ceja, tamborilear los dedos sobre la rodilla, estirar ligeramente el collar o la corbata... es cuestión de que lleguen a un acuerdo para diseñar lo que cada gesto simbolizará entre ustedes. El límite lo pone su imaginación, recuerden que disponen de todo su cuerpo para expresarse. Incluso un delicado mover de hombros o la manera de cruzar los pies puede ser una pista para llevar a su cómplice a la cama. Crear esa clave privada será igualmente una oportunidad excelente para darle un brío distinto al aspecto carnal de la relación.

EXPERIMENTE NUEVAS SEÑALES

Cada día es un cheque listo para ser cambiado por valores que incrementen la calidad de vida en pareja. Si usted no acostumbra mostrar interés erótico en su ‘media naranja’, entonces hoy es un buen momento para hacer algo al respecto. Dé un giro a su pasividad y vuélvase propositivo. No espere a que su compañero tome la iniciativa. Espérelo hoy con la cena lista y un moño sobre su cabeza: lo decimos en sentido metafórico, nos referimos a que use los recursos de su mirada, sus manos, su espalda y todo su cuerpo. Un gesto coqueto, incitador, puede ser más que efectivo para transformar un amanecer rutinario en un despertar lleno de sensual deleite.

Prepárese para llegar a la intimidad sin prejuicios anticipados. Deje que cada experiencia les brinde a usted y a su consorte una renovada plataforma erótica.

Los amantes extraordinarios practican con frecuencia. Saben de antemano que cada instante es único y que los días son claros, nublados u oscuros. Están dispuestos a arriesgarse en la búsqueda constante del clímax compartido, valiéndose de palabras, acciones y gestos.

www.sexologosilvestrefaya.com

Leer más de Siglo Nuevo

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Siglo Nuevo

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Cómo seducen tus gestos

Clasificados

ID: 620319

elsiglo.mx