La adquisición de un avión Falcón-20, modelo 1986, con un valor de un millón 800 mil dólares, provocó controversia entre autoridades locales y miembros del Congreso del estado, quienes acordaron hacer una revisión al expediente de compra.
El gobernador Mario López Valdez dijo que la ley no lo obliga a solicitar permiso previo al Poder Legislativo para ejercer una compra de este tipo, pues se trata de un asunto de seguridad de los funcionarios que hacen uso de la flota aérea oficial.
Anticipó que prepara la compra de dos nuevos helicópteros, uno de ellos para reponer el accidentado en labores de rescate, a fin de que el área de Seguridad Pública y Protección Civil cuenten con aparatos para su desempeño.
López Valdez explicó que tuvo que ser suplido el viejo equipo, con las mismas características, pero con 40 años de servicio, puesto que dicho aparato en los dos últimos sexenios presentó fallas en sus motores, sistema eléctrico y tren de aterrizaje.
En sesión, el Poder Legislativo acordó un punto de acuerdo para instruir al Auditor Superior del Estado, Marco Antonio Fox Cruz, revisar el expediente completo de la adquisición del Falcón-20, matrícula XC-HIX, para certificar que se cumplió con la Ley de Adquisiciones.
